Los dos políticos depositaron con pocos minutos de diferencia ofrendas florales en el Hemiciclo a Juárez de la capital mexicana, un gesto que refleja el abismo que les separa.
El presidente de México, Felipe Calderón, y el líder izquierdista Andrés Manuel López Obrador, rindieron este viernes sendos homenajes al ex presidente Benito Juárez (1806-1872), en el CCII aniversario de su nacimiento.
Los dos políticos depositaron con pocos minutos de diferencia ofrendas florales en el Hemiciclo a Juárez de la capital mexicana, un gesto que refleja el abismo que les separa.
López Obrador, quien aún no ha reconocido la victoria de Calderón en los comicios presidenciales del 2 de julio de 2006, evitó hacer declaraciones en el acto que protagonizó.
Por su parte, el presidente Calderón, quien había dejado sus flores minutos antes en el mismo lugar, encabezó más tarde una ceremonia en memoria del Benemérito de las Américas en el Palacio Nacional de la capital mexicana.
Allí, ante representantes del Senado y de la Suprema Corte de Justicia Nacional (SCJN), el presidente de México recordó que el mayor reto de su país es «impulsar el progreso (…) por la vía de las instituciones y de las leyes».
«Nuestra generación tiene la alta encomienda de luchar por el fortalecimiento del Estado de Derecho para que en México se cumplan los postulados de libertad, igualdad, seguridad jurídica, que nos consagra la Carta Magna», señaló Calderón.
Agregó que «quien ignora la ley y las instituciones de la República, ofende la memoria de Benito Juárez».
El ex presidente Juárez, una figura a la que recurre continuamente López Obrador en su mítines, fue, según Calderón, «la encarnación de la ley» y «el representante genuino de la legalidad».
Los comentarios de presidente de México se producen en un momento en que el izquierdista Partido de la Revolución Democrática (PRD) está inmerso en una profunda crisis por las irregularidades detectadas en las elecciones para renovar su dirigencia nacional.
El resultado de las mismas es aún incierto entre Alejandro Encinas, una figura cercana a López Obrador, y Jesús Ortega, representante de la corriente renovadora de la formación política.
No se descarta que la disputa, en manos de una comisión técnica del PRD, termine en manos del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), el máximo órgano jurisdiccional en materia de comicios del país, o en un recuento «voto por voto» de los sufragios emitidos.
EFE
