El Jefe de Estado ecuatoriano, entregó su compromiso a que los periodistas que quieran investigar las presuntas relaciones entre funcionarios de su Gobierno y la guerrilla colombiana, tendrán todas las garantías para hacerlo.
El presidente de Ecuador, Rafael Correa, ofreció todas las garantías a los periodistas que deseen investigar la supuesta relación entre funcionarios de su Gobierno y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), como dejó entrever Bogotá tras la violación territorial del pasado 1 de marzo.
Correa se refirió así a recientes críticas de la prensa a funcionarios que cuestionaron ciertas publicaciones vinculadas a la crisis diplomática con Colombia.
El jefe de Estado se «comprometió» a que los periodistas que quieran investigar las mencionadas presuntas relaciones «no tendrán absolutamente ninguna molestia, tendrán todas las garantías».
Correa dijo que, incluso, si algún periodista hubiese actuado mal, pedirá a las autoridades correspondientes «una especie de amnistía» para que pueda realizar su trabajo.
«Como presidente de la República le doy todas las garantías (a los periodistas) para que revisen lo que les dé la gana de la supuesta relación Gobierno-FARC, no tenemos nada que temer», puntualizó en su tradicional programa sabatino de radio.
Sin mencionar a ningún medio de comunicación en específico, felicitó que hayan obtenido información que se consideraba reservada sobre el ecuatoriano Franklin Aisalla, que murió en el campamento de las FARC bombardeado el pasado 1 de marzo por el ejército colombiano en territorio ecuatoriano.
La prensa local informó de que Aisalla era investigado por las fuerzas del orden de Ecuador desde 2003 por supuesta vinculación con las FARC, algo de lo que el jefe de Estado no estaba al tanto, por lo que ha cuestionado duramente a Inteligencia Militar.
Correa reiteró hoy que los servicios de inteligencia «fallaron totalmente» y aseveró que la «poca información» que recibió fue «equivocada» sobre el bombardeo del 1 de marzo y el caso Aisalla.
Reiteró que oficiales del servicio de inteligencia de Ecuador «trabajan para la CIA antes que trabajar para el Gobierno».
«Es gravísima la situación» en el servicio de Inteligencia, recalcó al anotar que tomará nuevas medidas tras haber sido ya removido del cargo la máxima autoridad del Servicio de Inteligencia del Ejército.
Correa remarcó que el asunto es «tremendamente serio. Están jugando con fuego».
Sin mayores explicaciones, pidió a sus compatriotas no creer en «accidentes aéreos, caídas de helicópteros, estrellamientos de aviones», y agregó: «no tengo muchas ganas de morirme todavía, pero vamos a empezar a ser un país soberano e independiente».
El jefe de Estado remarcó que no permitirá que hayan más servicios de inteligencia «que son, incluso, financiados por la Embajada de Estados Unidos, por la CIA (Central de Inteligencia Americana, por su sigla en inglés)».
«Cortaremos todo esto y tendremos servicios de Inteligencia ecuatorianos, de ecuatorianos y para los ecuatorianos, no para servir a potencias extrajeras, y por intermedio de ellos para servir al agresor de nuestro país», manifestó.
Aseguró que la demanda planteada ante tribunales de La Haya el pasado lunes contra Colombia por las aspersiones aéreas con el herbicida glifosato sobre plantaciones colombianas de coca cerca de la frontera con Ecuador es una respuesta de Quito a los «abusos que he venido cometiendo» Bogotá.
Quito cree que el glifosato atraviesa la frontera y afecta la salud de las personas, enferma animales y daña cultivos de plátano.
A más del caso en La Haya, Correa indicó que su Gobierno prepara «otras acciones legales» por la muerte del ciudadano Aisalla», a cuya familia ofreció «todo el respaldo del Gobierno».
Ello, aclaró, «porque independientemente de si era guerrillero, bombero, etcétera, es un ecuatoriano asesinado por fuerzas extrajeras en suelo patrio».
Agregó que «lo mejor para los dos países es superar el impasse pero con justicia y dignidad», pues para él, superar las «cosas dejando impunidad, agresiones asesinato, etcétera, no es resolver los problemas, es postergarlos, acrecentarlos en el futuro».
«Ojalá lo más rápido podamos superar este gravísimo incidente, restablecer relaciones con un país hermano como Colombia, pero con satisfacciones para Ecuador, para la familia Aisalla, con justicia y dignidad».
EFE
