Las autoridades recorrieron hoy el lugar de los hechos suscitados ayer, como consecuencia de la insurrección policial, a fin de recaudar los elementos «que ayuden a esclarecer» lo ocurrido.
El fiscal distrital de Pichincha, Marco Freire, dijo hoy que las autoridades investigarán si lo ocurrido el jueves se trató de un intento de «magnicidio» contra el presidente ecuatoriano, Rafael Correa.
Según explicó Freire, esa hipótesis se confirmará o descartará después de las investigaciones pertinentes.
Freire señaló a la prensa que la vida de Correa «corrió peligro» y que por ello están investigando si este hecho fue intencionado.
Las autoridades recorrieron hoy el lugar de los hechos suscitados ayer, como consecuencia de la insurrección policial, a fin de recaudar los elementos «que ayuden a esclarecer» lo ocurrido.
Según Freire, de comprobarse el intento de asesinar al mandatario, los responsables serán castigados con una pena de hasta doce años de prisión, de acuerdo al Código Penal.
El fiscal agregó que el informe se presentará en las próximas semanas, después de concluir la investigación en la que participará además personal de criminalística.
«Los peritos darán información sobre si hubo un intento para asesinar al mandatario o no», comentó Freire.
Para reconstruir los hechos, las autoridades esperan los resultados de las autopsias de las dos personas fallecidas en los enfrentamientos y también recogerán los testimonios de quienes resultaron heridos.
Asimismo, se solicitaron los vídeos a los medios de comunicación para identificar a los uniformados que participaron en los enfrentamientos y atentaron contra el jefe de Estado.
Freire comentó que durante las investigaciones también se determinarán a «los posibles autores intelectuales» de la sublevación.
