En su primer discurso tras su victoria sobre Sebastián Piñera con el 53,5% de los votos, la médico socialista recordó que Chile sorprendió al mundo con su »ejemplar» tránsito de dictadura a democracia y que ahora lo hizo al transformarla en la primera gobernante mujer elegida democráticamente en Sudamérica.
La médico socialista Michelle Bachelet se manifestó confiado que Chile será capaz de volver a sorprender al mundo, luego que este domingo la eligiera como la primera mujer elegida democráticamente en un país de América Latina.
La abanderada de la Concertación pronunció pasadas las 21.00 horas del domingo su primer discurso como Presidenta electa ante medio millar de partidarios apostados en el frontis del Hotel Plaza San Francisco, cuartel general del comando oficialista.
Flanqueada sólo por una gran bandera chilena, Bachelet comenzó su alocución asegurando que hasta hace cinco años nadie se habría imaginado que una mujer llegara a La Moneda. "¿Quién lo hubiera pensado? Parecía difícil, pero fue posible. Es posible, porque los ciudadanos lo quisieron, porque la democracia lo permitió", dijo.
Según el último cómputo oficial, dado a conocer a la medianoche con el 99,72% de las mesas escrutadas, la ex ministra obtuvo un 53,5% de los votos frente al 46,5% que registró el postulante de la Alianza por Chile, Sebastián Piñera.
«Gracias ciudadanos, gracias Chile, gracias por el voto de millones de ustedes. Gracias por la confianza que han depositado en mí. Gracias por invitarme a recorrer con ustedes el camino de la libertad, la igualdad y la prosperidad", aseveró la futura gobernante del país.
Bachelet aseguró que el suyo «no es el triunfo de una persona, de un partido ni de una coalición. Es el triunfo de Chile. Ganó Chile otra vez, como cada vez".
La Presidenta electa recordó que «el mundo ha mirado esta elección con una dosis de asombro", al constatar que la coalición que encabeza gobernará por 20 años consecutivos, pero especialmente porque se transformó en la primera mujer electa Presidenta en América Latina.
"Esta no es la primera vez ni la última que los chilenos asombramos al mundo. Tras 17 años de dictadura, transitamos ejemplarmente a la democracia», dijo Bachelet, que también recordó que se ha logrado una economía estable, que es imitada por otros países. "Los chilenos estamos orgullosos y vamos a seguir en este camino. Vamos a sorprender al mundo una vez más", aseveró.
En esa línea, aseguró que en su gobierno pretende demostrar que «una nación puede volverse más próspera sin perder su alma", que se puede crecer económicamente con respeto al medioambiente, que se puede estimular a los empresarios y a ayudar a los que se quedan atrás.
En el fondo, dijo, «se puede construir un país donde cabemos todos, mujeres y hombres, de la capital y regiones. Gente de todos los colores, credos y convicciones".
«Ese es el camino que vamos a recorrer juntos, amigos y amigas. Ese es el camino. ¡Gracias por elegirme para liderar a Chile en esta travesía! Yo también recorrí un largo camino para llegar aquí esta noche", agregó Bachelet.
Quién ha tenido una vida fácil
«Ustedes lo saben, no he tenido una vida fácil. ¿Pero quién de ustedes ha tenido una vida fácil? La violencia entró a mi vida destrozando lo que amaba. Porque fui víctima del odio, he consagrado mi vida a revertir ese odio. Y convertirlo en comprensión, tolerancia y, por qué no decirlo, en amor", añadió.
«Se puede amar la justicia y, a la vez, ser generosa", dijo, oportunidad en la que recordó el apoyo y acompañamiento que ha recibido de su madre, Ángela Jeria, y sus tres hijos, pero que también le habría gustado abrazar a su padre, el general Alberto Bachelet, muerto tras ser torturado durante la dictadura militar.
«Hay alguien que en este momento estaría muy orgulloso. Un hombre al que quisiera poder abrazar esta noche. Ese hombre es mi padre. Alberto Bachelet Martínez, general de la Fuerza Aérea de Chile. Heredé de él su amor por Chile y por todos los chilenos, sin distinciones. Su admiración por la naturaleza formidable de nuestro país. Su abnegado sentido del servicio publico. Su amor por el orden, su don de mando", sostuvo.
«Siento que de alguna manera inexplicable estoy cerca de él. Intuyo que todos los padres que están aquí, que todos los hombres que son padres y me escuchan, saben lo que es el amor y la lealtad de una hija", agregó.
Presidenta de todos
Bachelet señaló que «tengo una agenda ambiciosa, que emprenderé el mismo día que entre a La Moneda. Son sólo cuatro años. No hay tiempo que perder. Las chilenas y chilenos merecen nuestro mejor esfuerzo".
Aseveró que «comenzamos un nuevo capítulo de nuestra historia republicana. Y me siento afortunada. Chile es afortunado" y que «comenzamos este capítulo en buen pie para enfrentar lo que viene. Porque recibo un país en marcha, pujante, optimista".
En ese sentido, resaltó la obra del actual Presidente, Ricardo Lagos, ante lo cual el gobernante fue largamente ovacionado. «Más fuerte, para que se escuche en La Moneda", bromeó Bachelet, en referencia a la sede de gobierno, ubicada a dos cuadras del céntrico hotel.
La Presidenta electa también saludó a quienes votaron por Sebastián Piñera, Joaquín Lavín y, especialmente, Tomás Hirsch, sus rivales en estos comicios. «Hay allí miles de anhelos y aspiraciones de los que me hago cargo", indicó.
«A partir de este mismo instante, sus esperanzas son las mías. Sus anhelos son mis anhelos. A toda la gente que me recibió en sus casas. A todos los hombres y mujeres que me regalaron un abrazo y una sonrisa. A la gente de regiones, vaya mi saludo y compromiso", resaltó.
Nueva etapa
Bachelet aseguró que a partir del 11 de marzo, Chile iniciará una «nueva etapa", y aseguró que más allá de ser la primera Presidenta mujer, señaló que prefería que su gobierno fuera recurdado como uno «de todos y para todos".
«Mi compromiso es que el año 2010 habremos consolidado un gran sistema de protección social. Un sistema que dé tranquilidad a los chilenos y sus familias. La tranquilidad de saber que tendrán un trabajo decente. La tranquilidad de saber que sus hijos podrán estudiar y desarrollarse. La tranquilidad de saber que una enfermedad no tirará por la borda años de esfuerzo. La tranquilidad de saber que tendrán una vejez digna. Eso aspiramos todos. Eso garantizará mi gobierno", indicó.
Además, agregó que "el 11 de marzo también marcará el comienzo de un nuevo estilo en la política nacional. Un estilo de gobierno dialogante, participativo. Fui la candidata de los ciudadanos. Ahora seré la Presidenta de los ciudadanos. Chile requiere una nueva política para una nueva ciudadanía. Porque el hecho de que sea yo la que esté aquí esta noche es símbolo del cambio que hemos vivido".
A su juicio, la sociedad actual es «más abierta, más tolerante, más diversa", ya que «no quiere sólo derecho a voto, sino también derecho a voz. Quiere ser escuchada. Quiere forjar su propio destino. En mi gobierno daremos cauce a esas ganas de participar. Forjaremos una gran alianza entre política y sociedad".
La candidata también reiteró que «diré lo que pienso y haré lo que digo", y que "mi gobierno será un gobierno paritario, de los mejores y las mejores", en referencias que ya había hecho el pasado jueves, durante el cierre de su campaña presidencial.
«Será un gobierno de excelencia. Un gobierno de talentos. De caras nuevas y experiencia", añadió, y se comprometió a «construir un país más próspero, un país más justo, un país más solidario. Un país de todos y para todos".
«Para mí es un privilegio poder servir a Chile en esta fértil y nueva primavera. Porque, mis queridos conciudadanos, en la democracia que hemos construido ustedes son los mandantes. Y yo, desde el 11 de marzo, soy su mandataria. Su primera mandataria", puntualizó.
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