Francisco Encina (PS) y Antonio Leal (PPD) plantearon la necesidad de reformar el Código Penal, de manera de elevar las condenas y hacer inviable que una persona que participa en secuestros quede en libertad.
Los diputados Francisco Encina (PS) y Antonio Leal (PPD) se reunieron con el ministro del Interior suplente, Felipe Harboe, para plantearle de revisar el rol de la Agencia Nacional de Inteligencia (ANI) en el combate a la delincuencia.
Los parlamentarios, además, plantearon la necesidad de reformar el Código Penal, de manera de elevar las condenas y hacer inviable que una persona que participa en secuestros quede en libertad.
«Hemos planteado modificar la ley 19.974 para entregarle mayores facultades a la ANI en el combate a la delincuencia, particularmente lo que tiene que ver con acciones terroristas y delitos como el secuestro de personas», explicó Leal.
A su turno, Encina sentenció que «los casos acaecidos en la IX región y otros son demostrativos de que los servicios de inteligencia no están funcionando bien».
En la misma línea, el parlamentario PS planteó que -pese a la cantidad de información residual que maneja la ANI- se ha fallado para atrapar a Luis Araya Galaz, supuesto secuestrador de la ejecutiva María Soledad Lapostol, y al coronel retirado Iván Quiroz, prófugo hace meses tras su sentencia por la operación Albania.
«En otras partes del mundo los servicios de inteligencia tienen la capacidad de operar directamente en la lucha contra la delincuencia», agregó el diputado.
Por su parte, Leal explicó que el Sistema de Inteligencia del Estado, al ser creado en 2004, fue definido como una conjunto capaz de ejecutar acciones de inteligencia y contrainteligencia para asesorar la Presidente de la República y los diversos niveles superiores de conducción del Estado.
No obstante, según los parlamentarios, las facultades del ANI se han mostrado insuficientes para la prevención de delitos de gran impacto en la población. Esto debido a que se entiende que las labores de inteligencia relacionadas a la comisión de delitos en la esfera pública se vinculan a la inteligencia policial.
De ahí que los parlamentarios propusieron una acción de coordinación más eficaz entre la labor de la ANI y la inteligencia policial.
«Las funciones preventivas de inteligencia permitirán controlar las bandas armadas, así como delincuentes cuyas acciones causen alarma pública. Es más, una acción más eficaz de la ANI y la inteligencia policial, permitiría también un control más efectivo, por ejemplo, sobre las barras bravas», dijo Leal.
