No obstante, si en algo coinciden en el gremialismo es en el riesgo que corren agricultores y exportadores a raíz de la constante baja del dólar y prevén que si el gobierno no toma medidas al respecto, a la inflación y bajo crecimiento se sumará un aumento del desempleo, pues aseguran que comenzarán las quiebras
"La gente que pide que el Banco Central intervenga el dólar no tiene idea de lo que está hablando", fue la frase lapidaria con que la senadora UDI Evelyn Matthei echó por tierra el insistente llamado que dirigentes y parlamentarios de su partido han hecho al gobierno, justamente, para que se intervenga el mercado cambiario. Según la parlamentaria, lo que hay que hacer es pedirle a las autoridades que bajen la carga impositiva al sector privado.
No obstante, si en algo coinciden en la UDI es en el riesgo que corren agricultores y exportadores a raíz de la constante baja del dólar y prevén que si el Ejecutivo no toma medidas al respecto, a la inflación y bajo crecimiento se sumará un aumento del desempleo, pues aseguran que comenzarán las quiebras de estas empresas.
Esta es una de las razones por las cuales el presidente gremialista, senador Hernán Larraín, a la salida de una reunión con los exportadores, instó tan entusiastamente al Banco Central a intervenir el precio del dólar.
Algo que desconocía la senadora Matthei al momento de explicar que diariamente "se transan aproximadamente cuatro mil millones de dólares en transacciones que son dólar-pesos y todas las reservas que tiene el Banco Central son 16 a 18 mil millones… ¿Díganme ustedes cuánto duraría el Banco Central interviniendo el dólar? O sea, la gente que pide que el Banco Central intervenga el dólar no tiene idea de lo que está hablando".
Para la senadora y vicepresidenta de la UDI, la situación del dólar se debe a presiones inflacionarias tanto por problemas externos como internos -las heladas en el invierno o como el excesivo gasto fiscal-, ante lo cual al Banco Central no le queda más alternativa que subir las tasas de interés y al hacerlo cae el tipo de cambio, "así que en realidad la gente que le está pidiendo ayuda al Banco Central se equivoca".
A su juicio, lo que se debería hacer es pedirle al gobierno que baje impuestos, dándole "oxígenos al sector privado". De no ser así, advirtió acerca de futuras quiebras "de muchas empresas que exportan porque no son competitivas con este precio del dólar".
Por su parte, el senador Larraín, tras una reunión con los exportadores, había instado a intervenir el precio del dólar y aunque al conocer la postura de la senadora Matthei suavizó un poco sus primeras declaraciones, insistió en que "no podemos descartar, entre las medidas que se requieren para resolver la situación del sector exportador, la intervención del mercado cambiario, por parte del Banco Central".
Pero junto con ello declaró que los problemas generados por la inflación y bajo precio del dólar "no se resuelve con una sola medida, sino que hay que adoptar varias, entre ellas la reducción de los impuestos, a los combustibles entre otros, el control de la inflación (…), más el control del dólar con la intervención del Banco Central podemos configurar un cambio distinto".
Mientras tanto, el diputado Julio Dittborn, especialista en temas económicos, asumió una postura intermedia, entre los senadores Matthei y Larraín, señalando que "el precio actual del dólar es absolutamente ficticio y temporal, por lo que podría funcionar una intervención del Banco Central".
Pero aclaró que en ningún caso eso es suficiente, por lo que en coincidencia con sus predecesores, agregó que además "el gobierno tiene que implementar una batería de medidas que apunten a mejorar la competitividad de los exportadores", como bajar el ILA -impuesto a los alcoholes- o que el SAG no cobre por todos los servicios que presta, además, de todas las medidas que combatan la inflación para que el dólar suba.
