Encuentro serviría más para la reflexión que para la formación de nuevos dirigentes, un fin de semana de retiro en que el bloque buscará analizar el futuro, sin llegar a una declaración final. Camilo Escalona definió la instancia como un momento para »retomar la costumbre de hacernos cariño, de cultivar afectos y compartir».
Bajo el lema "El mañana está en curso", se dio inicio a una Escuela Nacional de Verano de la Concertación, instancia que vino a sustituir al cónclave que el conglomerado realiza en esta fecha y cuyos modestos objetivos serán sólo el intercambio de experiencias e ideas.
De esta forma, se opta por dejar de lado la oportunidad de realizar una autocrítica por los problemas que han afectado a la coalición a nivel interno de partidos, o intentar un análisis de cómo enfrentar el nuevo escenario político que se comienza a delinear.
Así se hizo saber de inmediato en la misma inauguración, que contó con las intervenciones de la Presidenta Michelle Bachelet, el ex mandatario Patricio Aylwin y el timonel del PS y vocero del oficialismo, Camilo Escalona.
Tres intervenciones que tuvieron como factor común el revisionismo de la obra de la coalición de Gobierno, rememorando su hito fundamental -la campaña del NO-, pasando por sus cuatro presidencias de la república hasta el apoyo incondicional que se debe dar a Bachelet.
De vuelta a la Escuela
La elección de una Escuela Nacional en lugar de un cónclave fue explicado por Escalona, quien señaló que se busca "retomar la costumbre de hacernos cariño", por lo que este retiro será una instancia de diálogo que no contempla la elaboración de una declaración final.
«Nos pareció importante que este encuentro sea para rehacer estos lazos afectivos, para conversar, para dialogar, para establecer las bases para competir en las próximas elecciones municipales, presidenciales y parlamentarias", sostuvo.
Si bien la Escuela se entendía como una instancia para la formación de dirigentes, su orientación resultó ser una reflexión a partir de conferencias que fija el tema en los desafíos de la Concertación para el futuro, especialmente en la política país y electoral.
Por otra parte, también se esperaba que la oportunidad sirviera para la aparición de nuevos rostros, los que reflejarían la temática de esta reunión que tiene por objeto pensar los desafíos futuros de la Concertación.
Sin embargo, al menos en la inauguración, no hubo caras nuevas. De hecho, los exponentes son los mismos nombres que se ven a diario, es decir, se mueven entre los presidentes o secretarios de partidos y los ministros de Estado.
No hay desgaste, según Escalona
Bastante inusual es la realización de una Escuela en lugar de un cónclave, lo que es percibido como una forma para descomprimir la presión que ha afectado a la Concertación, que van desde los problemas internos hasta la pérdida de la mayoría en el Senado.
A pesar de todo y de la clara evasión a realizar declaraciones a la coyuntura política que vive el conglomerado, Escalona dejó ver en su intervención algunas referencias a temas que conciernen al presente político del oficialismo.
Así, negó que la coalición esté desgastada y rechazó la tesis del desalojo. Y lo hizo parafraseando un pensamiento de Augusto Pinochet, quien decía que "esta coalición iba a ser cosas de meses, porque no decirlo de semanas, y que entre comillas iban a volver los vicios de los políticos del pasado y que nos íbamos a sumir en una refriega por quién mandaba más y quién mandaba menos, y quién tenía una cuota más o una menos. No ocurrió nada de eso".
También señaló que quienes se han alejado de la Concertación lo han hecho porque sus ideas políticas han cambiado, no así las del conglomerado. "Es cierto que algunos se cansaron, quién no se cansa, claro, a algunos ya no les gustó y buscan otras maneras de hacer política, aquí nadie esta obligado porque estamos reunidos por un común concepto de país", sostuvo.
Presidenta llamó a no dormirse
Por su parte, Bachelet llamó al conglomerado a no dormirse con la tarea hecha y a la importancia de que la Concertación sea dinámica para seguir trabajando por el país.
«Después de gobernar tanto tiempo, una fuerza política pudiera correr el riesgo de acolchonarse o perder dinamismo, y la Concertación tiene motivos para sentir satisfacción de la obra realizada, pero no tiene derecho a dormirse en los laureles y a perder el sentido de autoexigencia", aseveró.
También llamó a gobernar con la verdad, por eso señaló la importancia de reconocer errores, como la implementación de Transantiago -"palabra maldita" para la mandataria, la que incluso hacia un buen tiempo que no mencionaba-.
"Hemos cometido errores y debemos reconocerlos francamente cada vez que sea necesario", señaló, pero que tampoco se puede estar "llorar sobre la leche derramada" sin buscar soluciones.
Por último, si bien destacó los acuerdos alcanzados con la Alianza por Chile, también les hizo una crítica por su actitud negativa y de poco reconocimiento con la obras del Gobierno. "Quiero ser categórica, definitivamente no da lo mismo quién gobierne, no da lo mismo cómo entendemos el Estado, la relación con los ciudadanos, cómo entendemos la idea de justicia, de progreso. No da lo mismo", manifestó.
El programa
El programa de la Escuela Nacional se desarrollará en Punta de Tralca hasta el domingo 27 de enero y consta de cinco conferencias. La primera jornada contempla un "Análisis de logros y desafíos de los Gobiernos de la Concertación", donde expondrá el ministro de Segpres Antonio Viera-Gallo.
Los temas de la segunda jornada refieren a "Condiciones para la proyección de la concertación hacia el Bicentenario", que contará con la participación de los cuatro presidentes de partido, "Desafíos para un proyecto país" y "Desafíos y perspectivas de la elección municipal 2008".
Para el último día se espera la presentación del ministro del Trabajo y Previsión Social, Osvaldo Andrade, sobre "La reforma al sistema previsional chileno".
