Tras el fuerte by pass del que se sintieron víctimas por parte del Gobierno con la designación de Rodrigo Egaña, los ánimos en la entidad se relajaron y decidieron dialogar. En el encuentro solicitaron al delegado presidencial que gestione una reunión con la mandataria y detallaron los puntos que desean tratar con ella.
A las 11:00 en punto del miércoles, se inició el consejo extraordinario de la Corporación Nacional de Desarrollo Indígena (Conadi) en el segundo piso del hotel Diego de Almagro. El tema a tratar era la reciente designación del comisionado presidencial de políticas indígenas, Rodrigo Egaña, que sacó ronchas al interior del organismo, ya que se cuestionó duramente la "vista gorda" del Gobierno al no tomarlos en cuenta.
Por supuesto, el encuentro no fue fácil. Básicamente porque no había acuerdo respecto a si esta nueva figura sería reconocida por la entidad antes de concretar una esperada reunión con la Presidenta Michelle Bachelet, que lleva varias semanas aplazada y que tomó carácter de urgente tras el nombramiento de Egaña.
De hecho, esta sorpresiva asignación gatilló la convocatoria del consejo y, dada la celeridad con que se organizó, dos de los 15 consejeros no pudieron asistir. Por ello, estuvieron presentes cinco de los siete electos por las comunidades, tres presidenciales y cinco ministeriales.
Tras tensas discusiones, especialmente entre los consejeros ministeriales y el resto de los representantes sobre la postura a adoptar frente al nuevo cargo del ex subsecretario de la Presidencia, acordaron sentarse a dialogar con el nuevo funcionario.
Pero para dejar los puntos sobre las íes, el consejero José Santos Milla condicionó el encuentro, puntualizando que sólo se tratarían dos temas y no se daría espacio a "debate": solicitar su gestión para agendar la esperada cita con Bachelet y detallarle los puntos que desean abordar con ella.
El encuentro Conadi/Egaña
De esta forma, a las 16:00 horas el nuevo comisionado tuvo su primer encuentro con los representantes de la Conadi tras asumir su nuevo rol.
A diferencia de la extensa reunión de la mañana, no hubo tensión ni desacuerdos, porque tal como resolvieron, los consejeros se limitaron a tratar dos puntos. Pero "como lo cortés no quita lo valiente", según uno de los presentes, se dejó espacio para que Egaña, se presentara formalmente y les explicara el objetivo de su cargo.
Entre las aclaraciones, precisó que su rol será de apoyo y coordinación para impulsar avances en las tareas que le fueron asignadas, que incluyen impulsar el diálogo con las comunidades indígenas y la aprobación del Parlamento de un paquete de medidas legislativas a favor de éstas. Y que bajo ningún punto se pretende reemplazar a la Conadi.
Paralelamente, adelantó que la reunión con Bachelet no se concretará hasta después que retorne de sus vacaciones, que inicia esta semana.
Y como una clara muestra de que la tensión que invadió a la Conadi hasta ayer en la mañana bajó de revoluciones -aunque no desapareció- se acordó que la comisión política de la entidad trabajaría en conjunto con el comisionado para proponer soluciones a los puntos que expondrán a la mandataria.
Los puntos a tratar
Los temas que desean discutir no son para nada menores. Entre otros, solicitan que la Jefa de Estado precise el rol que le cabe a la Conadi, tomando en cuenta la nueva figura del comisionado y la relación que éste mantendrá con la entidad.
Además, desean revisar la necesidad de una pronta evolución del organismo con miras a convertirse en un Ministerio Indígena, y la urgencia de concretar una representación de los pueblos originarios a nivel parlamentario.
Tampoco olvidan las promesas incumplidas, entre las que se cuentan los compromisos adquiridos por Bachelet el 30 de abril de 2007 sobre la política del Estado chileno en materia indígena, que entre otros puntos incluía aplicar urgencia legislativa al Convenio 169 de la OIT.
Por ello, insistirán en el fortalecimiento de los derechos indígenas, que incluye evitar la aplicación de la ley antiterrorista en casos ligados a reivindicaciones de tierras; asegurar la aprobación del Convenio 169 y el reconocimiento constitucional.
Por otro lado, exigirán precisiones en el cronograma para el cumplimiento de dichos acuerdos y de los presupuestos asociados.
Finalmente, buscarán alcanzar un nuevo concepto para el fondo de desarrollo indígena que incluya vigencia de plazos mayores y el concepto de integralidad. Y al mismo tiempo ampliar el financiamiento y sentido del actual Fondo de Tierras y Aguas Indígenas (FTAI) hacia un instrumento en base a presupuestos plurianuales.
