La diligencia busca los contratos y resoluciones desde 2000 a 2002 del militante PS, período anterior al cuestionado por la Contraloría en su último informe. La magistrada (S) que hizo la petición, Ximena Sumonte, tiene experiencia en casos de corrupción e irregularidades en servicios públicos, ya que trabajó de cerca con la ministra Gloria Ana Chevesich en el caso GATE, que golpeó al corazón de la administración de Ricardo Lagos.
La ministra (S) del Cuarto Juzgado del Crimen, Ximena Sumonte, solicitó a Gendarmería 20 documentos relativos al trabajo desarrollado por el actual embajador de Chile en España, Osvaldo Puccio.
La diligencia, encargada al OS-9 de Carabineros -unidad de elite de la institución-, busca los contratos y resoluciones internas desde 2000 a 2002 que dictó el servicio de prisiones sobre el diplomático.
Sumonte, de esta manera, profundizó la pesquisa hecha por la titular del tribunal, Olga Quijada, a principios de febrero, quien solicitó también a Gendarmería la carpeta personal de Puccio, como también un informe a la cancillería.
Esta diligencia buscaba obtener los informes originales que Puccio entregó entre 2002 y 2003 cuando realizó una asesoría sobre "Investigación y Desarrollo de Gestión en procesos de rehabilitación». Y esto, porque la Contraloría estableció que existían caligrafías distintas en uno de los informes de Puccio.
La otra
La estrategia detrás de la solicitud de Sumonte es determinar si los mismos patrones de un presunta conducta delictual -de falsificación de instrumento público- existieron antes de 2002 con el mismo funcionario y cómo Gendarmería pudo haber hecho caso omiso o autorizado pagos, entre otros hechos.
De esta manera, también esta cumpliendo a cabalidad las diligencias de la querella presentada por la UDI en enero pasado, en que se pedía toda la información disponible en el servicio de prisiones sobre el diplomático.
La situación de Puccio comienza a complicarse, ya que todo indica que una de las firmas en el informe final fue hecha por una persona distinta, lo que configuraría el tipo penal, dejándolo en una incómoda situación como representante chileno ante el gobierno español.
La complicación es mayor si se piensa que Sumonte adquirió experiencia en investigaciones relativas a hechos de corrupción o irregularidades, cuando trabajo de cerca con la ministra Gloria Ana Chevesich, en la tramitación del caso GATE, que golpeó duro al corazón de la administración de Lagos.
En parte, por estas solicitudes y por el informe de la Contraloría es que el actual director de Gendarmería, Alejandro Jiménez, decretó la creación de una comisión para investigar hechos de corrupción.
Este grupo de auditores buscará todas las anomalías cometidas en las administraciones anteriores Alfredo Bañados (PRSD) y de Juan Carlo Pérez (DC) y de hallar delitos presentar las denuncias que correspondan al Ministerio Público.
