Gabriel Silber (DC) pide una medida «ejemplificadora», mientras que Carlos Montes (PS) habría optado por «algo intermedio».
Distintas visiones tienen los diputados de la Concertación sobre la decisión de la ministra de Educación, Yasna Provoste, de suspender por dos meses al jefe metropolitano de la Seremi, Alejandro Traverso, por irregularidades administrativas.
El más duro fue el presidente de la comisión de Educación, Gabriel Silber, (DC), quien señaló que esperaba una medida "más ejemplificadora" y que discrepaba de la decisión de la titular de la cartera.
Ello porque «de acuerdo al macizo informe de la Contraloría, Traverso no tuvo una actitud en términos de cuidar los recursos públicos, de modernizar el servicio para que no se produjera distracción de recursos. En esos términos, no por probidad sino que por buena gestión, buen gobierno y buena administración de los recursos correspondía una medida ejemplificadora en términos de unas sanción como corresponde a Traverso, alejándolo de sus funciones".
Requerido por qué habría hecho en su caso, dijo que habría aceptado sin trámite su renuncia o "la destitución inmediata en bien del buen gobierno, que es parte de la rendición de cuentas que debemos realizar efectivamente a la ciudadanía".
Si bien "Traverso no está vinculado en forma directa a estos temas si le cabía una mayor prudencia, cautela e implementar medidas para resguardar los recursos públicos".
Respecto de la cercanía del cuestionado funcionario con el presidente del PS, Camilo Escalona, comentó que esperaría que "haya sido un trámite conforme a derecho, al estatuto administrativo, pero hubiese aceptado una medida de otra naturaleza que aleje a Traverso de sus funciones".
No hay medidas que correspondan
La diputada Ximena Vidal (PPD) dijo que cuando hay problemas de dineros se deben adoptar "las medidas que correspondan" y que es preciso definir las responsabilidades del responsable de la Seremi.
"Si una persona tiene un problema de este calibre en su administración debería renunciar, independientemente de la opinión de la ministra", indicó.
En su calidad de integrante de la comisión de Educación, agregó que "la pregunta es cómo la ministra se va hacer cargo de dejar una persona que no puedo confiar, cómo la va a dejar en el mismo cargo".
Por su parte, el diputado Carlos Montes (PS) calificó de "difícil" la decisión de la ministra y se manifestó partidario de "algo intermedio que deja en claro que no se acepta un jefe que no controla el orden de sus cuentas".
Defendiendo la labor de Traverso, postuló que éste "había intentado en toda la última etapa corregir la irregularidad, que no tiene que ver con robo sino que con desorden, lo que es inaceptable, además él ya no está en el cargo".
Para su coelga Gonzalo Duarte (DC), desde el punto de vista político "la aceptación de la renuncia se considera la máxima sanción que un dirigente político tiene en el ejercicio de un cargo"
"Me parece que la aceptación de la renuncia al cargo es una sanción política lo suficientemente significativa", puntualizó.
