Adolfo Zaldívar en la testera del Senado, una ministra con posibilidades de ser destituida y la primera rebelión de los díscolos en la era Pérez Yoma son los ingredientes que complican la celebración del día de la mujer mañana, y del comienzo de la segunda mitad de la gestión de la Presidenta. Un cuadro que complica los ánimos para descorchar champagne en la Concertación.
Como si no bastara con que Adolfo Zaldívar se instale en la presidencia del Senado, convirtiéndose en la segunda autoridad más importante del país, con el apoyo de los independientes y la Alianza, anoche fuentes de la UDI confirmaron que presentarán a las 12:00 horas de este viernes la acusación constitucional en contra de la ministra de Educación, Yasna Provoste.
Eso, a pocas horas que se desatara una rebelión en el oficialismo que podría hacer peligrar el acuerdo entre la Concertación y la Alianza para que el socialista Juan Bustos encabece la Cámara este año.
Por lo menos, el jueves al mediodía en el Congreso no se hablaba de otra cosa que del rechazo de un grupo minoritario de parlamentarios del PPD y el PS al acuerdo firmado por los jefes de bancada de la Concertación y la derecha para renovar la presidencia del hemiciclo y las comisiones.
El pacto, que fue sellado en enero pasado con el visto bueno del jefe del gabinete Edmundo Pérez Yoma y del titular de la Secretaría General de la Presidencia José Antonio Viera Gallo, incluye que diputados de la UDI y RN presidan las comisiones de Trabajo y la de Derechos Humanos, dos áreas primordiales para el PS.
Uno de los alcances del acuerdo es que ni la Alianza ni la Concertación podrían vetar al candidato propuesto para cada comisión, con lo cual podía darse el caso, explica el socialista Sergio Aguiló, que "Julio Dittborn encabezará la comisión de Trabajo y Alberto Cardemil o Iván Moreira, la de Derechos Humanos, una cuestión inconcebible desde todo punto de vista por la importancia que tiene Trabajo en la agenda social y por los vínculos con la dictadura de los otros". Al alzamiento se sumaron Carlos Montes, Marco Enríquez-Ominami, Clemira Pacheco y Denise Pascal Allende.
En el PPD, en tanto, el tema aún se está analizando. El motivo, como señala un parlamentario, es que "de enero a ahora, el escenario cambió mucho. La llegada de Zaldívar a la presidencia del Senado y la acusación contra Provoste tienen a todo el mundo alerta".
Pese a que el lunes próximo al mediodía en el Palacio Ariztía está fijada una reunión donde se pretende zanjar el asunto, "si no sale humo el escenario puede ser complicado", aseguran.
La reforma de Andrade
La Moneda siente que la Reforma Previsional es su gran caballito de batalla para destacar la obra del Gobierno en este segundo aniversario. Por eso, el ministro Osvaldo Andrade, quien la sacó adelante en su proceso legislativo, estará en el acto de promulgación de la Reforma en La Moneda junto a la Presidenta y el titular de Hacienda, Andrés Velasco, en una actividad fijada para las 10 de la mañana de martes 11.
Por eso causó preocupación que durante la mañana de ayer trascendiera que algunos de los parlamentarios díscolos habrían llamado al ministro Andrade para pedirle que intercediera en el impasse que tocaba directamente a la Comisión vinculada con su cartera. Y aunque Andrade no quiso referirse al tema, y tanto Aguiló como Enríquez Ominami, negaron haberlo contactado, el asunto es un síntoma del crispado ambiente político, donde los discursos complacientes pueden sonar un tanto forzados.
