El ruido de un nuevo cambio de gabinete y el costo que podría tener para el PS la salida del secretario de Estado, hacen improbable que deje su cargo, aseguran miembros de la mesa partidaria. El diputado Marcelo Díaz, citado en la prensa como uno de los promotores de Andrade para la elección interna, asegura que no existe división en la Nueva Izquierda y que se trata de un "conflicto artificial" aprovechado por la disidencia para meter una cuña al timonel Camilo Escalona.
Mientras el ministro del Trabajo Osvaldo Andrade se encuentra en Ginebra asistiendo a una reunión de la OIT, las corrientes internas de su partido no han dejado de hablar sobre su eventual candidatura a la presidencia del PS.
El tema fue interpretado por la disidencia como una disputa de liderazgos y una crisis al interior de la Nueva Izquierda, corriente liderada por el actual timonel socialista Camilo Escalona, a la cual adscribe Andrade.
Entre los allegados a Gonzalo Martner y los cercanos a Isabel Allende y Carlos Ominami, leen la hipotética candidatura de Andrade como el reconocimiento al peso de la oposición a Escalona que se materializó en el congreso partidario del 15 de marzo.
De acuerdo a estas versiones, la irrupción del secretario de Estado como alternativa a Escalona se debe a que el actual timonel podría perder contra la disidencia en los comicios del 27 de abril.
Algo descartado de plano, según una fuente partidaria: "Para Camilo estos dos años han sido durísimos por el tema económico y la relación con la presidenta, pero sea quien sea el candidato, la votación y la vigencia de la mesa no están en duda".
El posicionamiento de Andrade
Definido como un "muñequero" por excelencia, Andrade arribó al cargo de ministro del Trabajo por su cercanía con la Presidenta -a quien llamaba "rucia"- y gracias al apoyo de Escalona. A ambos los une amistad personal y una historia política de años.
Desde que asumió la cartera, Andrade se perfiló como un político hábil y capaz de llegar a acuerdos con todos los sectores en el Congreso, amén de la batería de proyectos de ley que comandó, incluida la reforma previsional.
Debido a lo anterior, y sin ser conocido inicialmente, Andrade logró posicionarse e ingresar a la codiciada lista de personeros de la encuesta CEP.
"Es natural que quiera independizarse de Camilo", sintetiza un miembro de la disidencia que explica que su buena evaluación como ministro pesa fuerte para promoverlo como candidato en reemplazo de Escalona. Algo que estaría descartado pese a que "Andrade lo pensó en un minuto", asegura un diputado de la Nueva Izquierda.
El tema, sin embargo, es definido como un "volador de luces" y un intento de la disidencia de "meter una cuña" en la Nueva Izquierda, según el diputado Marcelo Díaz. Algo que en el entorno de Gonzalo Martner reconocen en privado, debido a que tendrían posibilidades de una nueva renovación socialista si Andrade encabeza el PS. La tesis es reafirmada por otra fuente consultada que agrega que "Andrade es más fácil de tratar que Camilo".
La posible candidatura de Andrade prendió esta semana luego que La Segunda asegurase que miembros de la Nueva Izquierda expresaron su interés en apoyar a Andrade. "A mi me preguntó un periodista qué me parecería como presidente del PS y yo respondí que muy bien, pero eso no significa que lo estemos candidateando", asegura Díaz, explicando que jamás ha conversado con el ministro para preguntarle su opinión.
A raíz de estas versiones de prensa, el diputado sostuvo entre el martes y miércoles varias reuniones con el resto de los parlamentarios Nueva Izquierda de su bancada. "Tuvimos una conversación y vimos que este no es más que un conflicto completamente artificial porque no hemos propuesto a Andrade ni dicho que sea candidato", explicó.
Costos para el PS y La Moneda
Las listas para la elección del PS deberán ser inscritas el jueves 27 de marzo. Hasta el momento ni Escalona ni Andrade han dado señales públicas de estar interesados en presidir la tienda del hacha roja, aunque es sabido que el actual timonel desea ser reelegido por dos años más en una contienda donde deberá medir fuerzas con la diputada Isabel Allende y su lista "Las Grandes Alamedas".
Además, la idea de que postule Andrade no es muy probable que se concrete, explica un integrante de la mesa. El costo para el PS y La Moneda, agrega, podría ser muy alto. "Implicaría un nuevo cambio de gabinete que añadiría más ruido al segundo tiempo del gobierno y el PS perdería un ministro que está muy bien evaluado". Este último punto es uno de los más mencionados, tanto por los miembros de la disidencia que ven a Andrade como una carta que daría tiraje a la chimenea y les brindaría una posibilidad de obtener mayor poder partidario, como por aquellos que han señalado que el ministro sería un buen timonel.
