En los próximos días la senadora Soledad Alvear sumará nuevos portavoces que se harán cargo de las circunstancias políticas que vaya produciendo la carrera presidencial. La idea es despejar su agenda e impedir el desgaste que le significa ser candidata a La Moneda y timonel de su partido.
Por Pablo Basadre G.
Hace unas semanas un antiguo dirigente político le comentó a Gutemberg Martínez, esposo de la presidenta de la DC, Soledad Alvear, que las vocerías de la senadora le recordaban mucho a la gestión de Adolfo Zaldívar. El dirigente le dijo: "Soledad no puede estar en todas. La contienda presidencial lanza a los medios muchos temas políticos y no es bueno que ella se haga cargo de todo". A Martínez el comentario no le pareció lejano e incluso le reconoció que hacía un tiempo que se lo venían planteando en algunas reuniones.
De hecho, según fuentes de la directiva, uno de los primeros que hizo el "punto" fue el ex diputado y experto internacional del PDC, Tomás Jocelyn Holt. La primera señal de lo que vendría la dio la propia Soledad Alvear a la salida de la reunión del lunes pasado con Bachelet en La Moneda. Al ser consultada por la polémica generada luego de la entrevista del presidente del PPD, Pepe Auth, donde le dio su respaldo al senador Frei, Alvear dijo que no se referiría al tema.
Lo importante para el círculo de Alvear era despejar su agenda política y evitar que ella sea la encargada de llevar la contingencia. En su equipo se debatió la estrategia de diferenciar los temas políticos de los presidenciales, que tienen una lectura distinta. "Detrás de lo que hizo (Pepe) Auth, por ejemplo, hay cosas que no se despejan con una cuña de Soledad, por eso es necesario que alguien más se haga cargo", comenta un miembro de la mesa directiva.
Hasta el momento las vocerías las llevaban los diputados Ricardo León y Gonzalo Duarte, el senador Jorge Pizarro y el secretario general de la tienda, Moisés Valenzuela. Ahora, según el esquema, Tomás Jocelyn Holt -quien durante mucho tiempo fue cercano a Adolfo Zaldívar- será uno de los que se sumarán al equipo. También comenzará a oficiar en esta labor el diputado Gabriel Silber, hijo de la alcaldesa de Quilicura, Carmen Romo. Y con el tiempo, según una fuente de la DC, se ampliarán hacia otros militantes.
Las nuevas vocerías, que ya comenzaron a estrenarse esta semana, no fueron una decisión fácil. Al comienzo de las conversaciones incluso se llegó a plantear que el "mandato" recayera en otra persona que no necesariamente fuera del partido. Sin embargo, se optó por dos miembros de un perfil muy distinto. "Tomás se hará cargo de los grandes temas", comenta un parlamentario. Y agrega: "Es muy importante, cuando quieres construir una candidatura, hacerse cargo de todo: peticiones, dudas, etc, y esa responsabilidad no tiene por qué recaer sólo en el candidato, en este caso candidata". En el freísmo, sin embargo, explican que el Alvearísmo sólo está imitando el sistema de trabajo del senador que tiene en esos roles a los ex ministros Belisario Velasco y Alex Figueroa.
El peso de la presidencia
El problema de determinar las vocerías en el último tiempo y así despejar la agenda política de Alvear se había debatido casi al mismo tiempo con la idea planteada por su círculo de suspender su cargo de presidenta de la DC por un tiempo.
La idea, según un antiguo dirigente, tomó fuerza, pues en la DC habían analizado el camino de cada uno de los presidentes de partido y la tesis que había ganado fuerza era el pésimo final de todos quienes han ocupado el cargo en el último tiempo.
Se habló, por ejemplo, del actual ministro de Relaciones Exteriores, Alejandro Foxley, quien debió aguantar el golpe del colorín Zaldívar -conocido en la tienda como el "Jahuelazo"- cuando desató la rebeldía al interior del partido en 1997 y sepultó las aspiraciones presidenciales del canciller. O Enrique Krauss que también fue un presidente que pago costos políticos altos cuando Ricardo Lagos le ganó las primarias a Andrés Zaldívar.
De todos, el caso más emblemático fue el de Ricardo Hormazábal, quien se hundió políticamente luego de la mala inscripción de los candidatos al parlamento. Todos esos riesgos son los que se quieren evitar en la DC, a pesar de que Alvear se negó a dejar la presidencia. "El hecho de mantenerse en el puesto también es una señal de la intención que hay de empatarle a Frei en todo. No hay que olvidar que Eduardo ha sido el único que fue presidente del partido y también presidente de Chile", comenta un freísta.
