Mientras Juan Pablo Letelier (PS) advirtió que tras sus dichos el diplomático se convirtió en un «embajador inútil», la senadora DC Ximena Rincón dijo que ya no es él quien tiene que dar explicaciones, sino que debe hacerlo el propio Presidente de la República. En el PPD Jaime Quintana dijo que este episodio pone en riesgo las relaciones con Argentina y Guido Girardi manifestó que el jefe de Estado tiene la oportunidad de demostrar que para él los DD.HH. no son un tema «menor e insignificante».
Durante esta jornada el caso de Miguel Otero ha seguido cobrando relevancia, al punto que los jefes de las bancadas de la Concertación decidieron salir como bloque a exigirle al Presidente de la República, Sebastián Piñera, la destitución del embajador de Chile en Argentina debido a que sus polémicas declaraciones habrían generado ruido en las relaciones con el país vecino.
De hecho, y pese a que el diplomático ofreció disculpas, el senador del PS Juan Pablo Letelier no escatimó en comparar sus declaraciones con el efecto que causa «un elefante en una cristalería».
A primera hora los senadores Alberto Espina (RN) -sobrino de Miguel Otero- y Hernán Larraín (UDI) insistieron en la defensa que su sector ha hecho del diplomático reiterando que si bien pudo cometer un error con sus dichos, éstos fueron efectuados a título personal, y acusaron a la oposición de intentar sacar provecho político del polémico episodio.
Acto seguido, la Concertación salió al paso señalando que los nuevos antecedentes conocidos respecto a cómo se gestó la polémica entrevista agudizan la situación generada por Otero. Al respecto Letelier manifestó que si bien éste ha pedido disculpas por el agravio que causó a quienes sufrieron las violaciones a los derechos humanos en Chile y Argentina, el tema de fondo «es que este embajador se ha transformado en un embajador inútil que no le sirve a los intereses del país y a las relaciones de política vecinal», más aún cuando a su juicio las relaciones de Chile con Argentina debieran ser «del más alto nivel y de la mayor fluidez», aludiendo con ello no sólo a la situación de Chile en el contexto sudamericano, sino también al tema de Campos de Hielo.
Por lo mismo Letelier fue enfático en manifestar que Miguel Otero «debería dar un paso al lado y evitarle a Piñera el bochorno que estamos teniendo, porque los costos sólo los vamos a percibir en la medida que no se tome esta decisión y al embajador Otero no lo va a recibir ni el tercer secretario de la Cancillería argentina después de este incidente».
Y mientras en el oficialismo insisten en transmitir la idea de que los dichos del representante diplomático no afectaron las relaciones entre Chile y Argentina, el senador del PPD Jaime Quintana hizo ver que no sólo se pusieron en riesgo las relaciones con Buenos Aires por un tema como los derechos humanos que es especialmente sensible para el actual gobierno de Cristina Fernández, sino que tambíen perjudican las relaciones con Cuba, nación a la que el diplomático aludió en la entrevista concedida a Clarín.
En la Concertación manifestaron que o el embajador tiene que poner su cargo a disposición o Piñera debe perdirle la renuncia, pues de lo contrario, según recalcó el senador Guido Girardi (PPD) el mandatario se estaría haciendo parte y avalando los dichos de Otero.
«Si el Presidente Piñera no tiene una actitud firme y decidida y no dice nada, quiere decir que hace suyas las expresiones del embajador Otero, y que sigue habiendo en la derecha la misma visión de siempre respecto de las violaciones a los derechos humanos de que es un tema menor e insignificante», setenció el parlamentario.
En este sentido, la subjefa de la bancada de la Democracia Cristiana, senadora Ximena Rincón, asumió una actitud aún más categórica, advirtiendo que a estas alturas «la explicación ya no la debe dar el senador Otero, la debe dar el Presidente de la República».
