La representante de los presos en Concepción, Natividad Llanquileo, confirmó que la última propuesta del Ejecutivo cumplía con las expectativas y que sólo faltaba el pronunciamiento de los ayunantes. Pero Jorge Huenchullán, quien representa a los reclusos de la cárcel de Angol, dijo que no se daban las condiciones para finalizar la huelga, ya que la oferta de las autoridades no garantizaría que en el futuro otro mapuche no fuera procesado por la Ley Antiterrorista.
Un último acuerdo alcanzado esta tarde tras las negociaciones del gobierno con los familiares de los presos mapuche en huelga de hambre, prometía poner fin al ayuno que iniciaron hace 82 días 34 comuneros en distintos penales del sur del país.
Las versiones más optimistas surgieron en Concepción de parte de la vocera de los reclusos de la Región del Bío Bío, Natividad Llanquileo, quien participó en las tratativas bajo la mediación del arzobispo de la arquidiócesis penquista, Ricardo Ezzati, en las que el gobierno estuvo representado por el subsecretario de la Secretaría General de la Presidencia, Claudio Alvarado.
Al término de ese encuentro, que se llevó a cabo en la residencia del religioso, la joven portavoz aseguró que el acuerdo con el Ejecutivo estaba listo y que ahora sólo faltaba conocer la opinión de sus representados para poner fin al prolongado ayuno de más de dos meses.
De hecho, se indicó que Natividad Llanquileo se encontraba esta tarde reunida con ellos en la cárcel El Manzano y que daría a conocer, alrededor de las 19:30 horas, si la huelga continuaba o no.
Pero un panorama no tan alentador se producía simultáneamente más al sur, donde el representante de los comuneros en huelga de Angol, Jorge Huenchullán, adelantaba que el acuerdo que surgió en Concepción no garantizaba que, en el futuro, otro comunero mapuche no fuera procesado por la Ley Antiterrorista.
De este modo indicó, en declaraciones a la radio Bío Bío, que todavía no había un piso suficiente para poner término a la huelga de hambre.
Su posición se contrapone con la de Natividad Llanquileo, quien aseguró que en la mesa de diálogo propiciada por Ezzati, estaba representada «la mayor parte» de los huelguistas.
En Temuco, en tanto, el ministro del Interior, Rodrigo Hinzpeter, y el titular de la Segpres, Cristián Larroulet, se encontraban reunidos con otros representes de los ayunantes de Angol, Víctor Queipul, y Rodrigo Curipán. Este último es quien, el lunes último, solicitó que se sentaran a negociar representantes del Poder Judicial y del Ministerio Público, petición que fue rechazada no sólo por La Moneda, sino que por el propio presidente de la Corte Suprema, Milton Juica.
En el encuentro, que se llevaba a cabo en la Intendencia de la Novena Región, estaban presentes también el ministro de Planificación, Felipe Kast, y el intendente de la Araucanía Andrés Molina.
