Según el actual presidente del PRI, Juan Ignacio García se ha negado a inscribir la directiva del partido que ordenó el Tribunal Supremo, el cual lo restituyó en el cargo.
El presidente del Partido Regionalista de los Independientes (PRI), Jaime Mulet, denunció al director del Servel, Juan Ignacio García, de presunta prevaricación y tráfico de influencias y recurrió al Tribunal Calificador de Elecciones (Tricel) por la indebida demora en inscribir la directiva que él preside ante el organismo.
“El director del Servel colmó mi paciencia, se ha negado, sin razón alguna a inscribir la directiva del partido que ordenó el Tribunal Supremo, donde me restituyó como Presidente Nacional. Yo no descarto el tráfico de influencias y estamos estudiando inclusive una presunta prevaricación en ese servicio”, subrayó el tres veces diputado por la Región de Atacama.
”Don Juan Ignacio García recibe con los brazos abiertos y da pronta tramitación a algunas solicitudes de quienes hoy día no tienen legitimidad para dirigir el PRI y se niega a cursar las nuestras. Ha dejado de actuar con la imparcialidad que debe. Es lamentable decirlo pero este funcionario tomó posición y ayuda indebida e ilegítimamente a quienes se quieren perpetuar en cargos de manera ilegal y trasgrediendo los estatutos de nuestro partido”, enfatizó.
“He recurrido de queja y de apelación ante el Tricel y, reitero, estudio una querella por prevaricación con todas sus consecuencias en un país donde se respetar el Estado de derecho. Confío en el Tricel, es un tribunal integrado por miembros de la Corte Suprema de Justicia y ello garantiza su imparcialidad, reiteró Jaime Mulet.
El Tricel deberá enmendar la conducta del director del Servel, Juan Ignacio García, que es un servicio que solo debe registrar los actos de los partidos y no inmiscuirse ni menos asumir posiciones al interior de las colectividades políticas, dijo el abogado Oscar Cáceres que elabora la acusación.
Mulet reasumió la presidencia del PRI tras un fallo del Tribunal Supremo, convocó a un Consejo General que decidió llamar a elecciones generales de todos los dirigentes para enero próximo.
“Los partidos deben renovarse mediante el ejercicio de la democracia interna y convocamos a elecciones generales para enero. Es una demostración concreta del espíritu que debe prevalecer en la política que contrasta con acuerdos copulares y maniobras administrativas de carácter ilegal con complicidad de funcionarios que se apartan de las normas establecidas en la ley”, concluyó Jaime Mulet.
