Cuando se acercaba el minuto 40 y todos esperaban que se concretara la inusual protesta anunciada por los hinchas, Alexis Sánchez abría la cuenta a favor de «La Roja», desatando la algarabía de quienes llegaron hasta el Estadio Monumental. No faltaron eso sí los cánticos, tanto para apoyar al saliente técnico rosarino, como los de repudio al presidente electo de la ANFP, Jorge Segovia.
La selección chilena se impuso esta noche por 2-0 a su similar de Uruguay, en partido de carácter amistoso que marcó la despedida del argentino Marcelo Bielsa como entrenador de la ‘Roja’.
La emoción marcó la jornada en el Estadio Monumental por el adiós del técnico que instaló un método de trabajo que le permitió a Chile adquirir un interesante patrón futbolístico. Con el rosarino, el cuadro nacional fue la sorpresa de las clasificatorias al Mundial de Sudáfrica al finalizar segundo, tras Brasil, y en la Copa del Mundo se llegó a octavos de final.
A minutos del pitazo inicial el grito de ‘Ohh Bielsa no se va’ se hacía más fuerte que nunca en el recinto de Colo Colo e incluso un grupo de hinchas ingresó al campo con la clásica bandera: ‘Don Marcelo Bielsa, Chile le agradece’, que finalmente fue obsequiada al ‘Loco’.
En el encuentro, la ‘Roja’ fue merecidamente la vencedora al ser el claro dominador de la brega, exhibiendo el toque del ex DT de Newell’s y Argentina con el permanente vértigo en la tenencia del balón y un ataque que hizo mucho daño a los charrúas.
A los 10′ llegó la primera real opción de riesgo con un remate de Humberto Suazo desde fuera del área, tras taco de Alexis Sánchez, que desvió con complicaciones el meta Muslera. En la jugada posterior, Mark González le robó un balón a un zaguero rival pero su remate en la ‘zona caliente’ salió desviado.
Mientras Chile buscaba y buscaba con un interesante despliegue por las bandas, Uruguay trataba de bajar las pulsaciones al partido haciendo todo lento. El equipo que dirige Oscar Washington Tabárez estuvo muy lejos del combinado que brilló en Sudáfrica al finalizar en el cuarto lugar.
Cuando la etapa inicial entraba a tierra derecha, el local abrió la cuenta ante 40 mil hinchas en Macul con anotación de Sánchez. El ariete del Udinese recibió en cómoda posición e las cercanías del área, enganchó y luego sacó un derechazo que encontró la red ante cierta complicidad del portero Muslera.
Todo esto ocurría poco antes del minuto 40 de juego, momento en el cual supuestamente iba a producirse la anunciada protesta de nalgas al aire con que habían amenazado los hinchas a través de las redes sociales, y cuyo objetivo era expresar su malestar por la salida del presidente de la Asociación Nacional de Fútbol Profesional (ANFP) , Harold Mayne Nicholls, y la elección del español Jorge Segovia al frente del ente a cargo del balonpié nacional.
Pero el «cara pálida», que sólo unos pocos se atrevieron a insinuar, quedó en nada y se disolvió en medio de la algarabía por el gol. Y lo que no faltaron durante todo el partido fueron los gritos de repudio dirigidos a Segovia, quien llegó al estadio cuando corría el minuto 44 del primer tiempo.
Cuatro minutos después del 1-0, la visita quedó con 10 hombres en el terreno de juego al ver la roja, tras doble amonestación, el volante Walter Gargano.
Con un hombre de más, el elenco local se vio en el complemento con mayor comodidad en el gramado del Monumental. Esto le permitió crear más espacios ante un Uruguay que sólo apostaba a algún contragolpe para hacer daño en el pórtico del capitán Claudio Bravo.
Luego que a los 54′ y 70′ se lo perdieran los atacantes Fabián Orellana y Esteban Paredes, Arturo Vidal fue el encargado de levantar a la afición de sus asientos con el 2-0 a los 74′. El hombre del Bayer Leverkusen sacó un remate de 25 metros que encontró una floja reacción del arquero oriental, terminando el balón en el fondo del arco.
Un buen triunfo para la ‘Roja’ en este partido para celebrar el centenario del seleccionado, como también del estreno de la nueva indumentaria. No obstante, lo más importante fue el adiós a Bielsa, que deja el combinado con un 60 por ciento de rendimiento y dejando un estilo que será difícil de igualar.
