El parlamentario expresó en mayo de 2011 que no le parecía adecuado que la magistrada, hoy cuestionada por su rechazo a los recursos contra HidroAysén en circunstancias que su hermano se desempeña como abogado asesor de Colbun, haya pasado al Poder Judicial después de desempeñarse por más de 30 años en la empresa de auditoría PriceWaterhouse.
Hace casi un año, el senador del MAS Alejandro Navarro había adelantado por la prensa su rechazo a la designación como integrante de la Corte Suprema de María Eugenia Sandoval, quien fue cuestionada por haberse pronunciado sobre los recursos de protección en contra de HidroAysén pese a que su hermano, el abogado Gerardo Sandoval, es asesor de Colbún, compañía del grupo Matte e impulsora, junto a Endesa, del megaproyecto energético.
En un comunicado fechado a principios de mayo de 2011, el parlamentario había puesto en tela de juicio el hecho que la actual ministra del máximo tribunal llegara al puesto tras desempeñarse por más de 30 años como experta tributaria de la empresa PriceWaterHouse, misma auditora en tela de juicio por su rol en el caso La Polar.
«No nos parece que una persona que durante casi tres décadas se desempeñó profesionalmente como experta tributaria de la empresa PriceWaterHouse en Chile, Colombia y Estados Unidos, desempeñándose a favor de los intereses de grandes empresas, hoy pase, luego de tres años como abogado integrante de una Corte de Apelaciones a integrar el máximo tribunal del país», señaló en ese entonces Navarro, según recordó su oficina parlamentaria.
El legislador no dudó también en acusar de un posible conflicto de interés de la magistrada, hoy en la palestra por haberse sumado a la mayoría de la estrecha votación de 3-2 que dio luz verde a HidroAysén, junto al ministro Pedro Pierry, este último cuestionado por no haberse abstenido de resolver, considerando que es dueño de 100.000 acciones de Endesa. Un grupo de senadores de distintas bancadas envió un oficio al presidente de la Suprema para que se pronuncie sobre el proceder ético de ambos magistrados.
«En estos nombramientos es importante que se cautelen principios básicos que permitan no afectar la credibilidad y la confianza en el Poder Judicial y eso, al menos en mi opinión, no se cumple en este caso», señaló Navarro.
