El director del sondeo, Roberto Méndez, aseguró que el caso no sólo repercutió en el resultado del timonel de la UDI, sino que también afectó a todo el espectro político. Esto, por cuanto el estudio refleja el aumento de la desaprobación de las coaliciones del oficialismo y la oposición y también de instituciones como el Senado y la Cámara de Diputados.
El caso Penta y su arista política, el denominado caso Pentagate, repercutió en los resultados de la encuesta Adimark-Gfk dada a conocer este jueves, principalmente por la baja evaluación que registró el presidente de la UDI, el diputado Ernesto Silva, uno de los militantes gremialistas que aparece entre quienes recibieron dinero por parte del grupo controlado por Carlos Eugenio Lavín y Carlos Alberto Délano.
El parlamentario de la UDI figura con la mayor desaprobación (64%) y, por ende, la más baja aprobación (27%) en el ítem abocado a medir cómo percibe la ciudadanía el trabajo de los timoneles de las tiendas tanto del oficialismo como de la oposición.
A Silva lo siguen el presidente del Partido Comunista, Guillermo Teillier (60% de desaprobación y 35% de aprobación), el de RN, Cristián Monckeberg (59% de desaprobación y 31% de aprobación) y el timonel del PS Osvaldo Andrade (56% de desaprobación y 37% de aprobación).
Y aunque ninguno bajó su rechazo del 50%, los mejor evaluados son los presidentes de la DC y el PPD, Ignacio Walker y Jaime Quintana, respectivamente, ambos con 39% de aprobación y 52% de desaprobación.
En declaraciones a CNN Chile, el director de Adimark, Roberto Méndez, considera que el caso Penta impactó no sólo a Silva y la UDI, sino que a todo el espectro político. Prueba de lo anterior, dijo, es el aumento de la desaprobación tanto de la Alianza por Chile como la Nueva Mayoría y del Senado y la Cámara de Diputados, que son las instituciones donde los políticos de ambos bloques desempeñan sus funciones.
En el caso de la Alianza, la desaprobación fue de 71% (subió dos puntos en comparación con la medición de noviembre) y la aprobación llegó a 20% (cayó un punto). Asimismo, la desaprobación de la Nueva Mayoría llegó a 59% (aumentó cinco puntos) y la aprobación cayó de 36% a 32%.
Asimismo, el sondeo detalla que frente a la pregunta «¿Usted apueba o desaprueba la forma cómo el Senado está haciendo su labor?», el 68% de los encuestados (1,0% más que en noviembre), se inclinó por desaprobarla y el 24% por aprobarla (un punto más que el mes anterior).
Más abultada fue la desaprobación de la Cámara de Diputados, que en un mes creció cinco puntos para quedar en 71%, reduciéndose la aprobación a 21% tras una fuerte caída de cuatro puntos.
