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En las últimas horas, La Moneda se ha jugado el todo por el todo para que la acusación constitucional contra el ministro de Desarrollo Social, Giorgio Jackson, se caiga en la votación de la cuestión previa, evitando así que se discuta el fondo del libelo. Uno de los argumentos a que se aferran, son los evidentes problemas que ha tenido la oposición para alinearse en relación con el proceso gestado en el Partido Republicano. Diputados de la UDI y RN han manifestado sus discrepancias con una acusación que, al parecer –sostienen–, carece de sustento técnico y se basa más bien en una decisión política. Un caso diferente al de la exministra de Justicia, Marcela Ríos, cuyo libelo se votará el próximo miércoles en la Sala de la Cámara y que podría aunar esfuerzos opositores, con el fin de recabar información sobre desprolijidades en el proceso de selección y anuncio de indultos.
Este jueves, a las 10:00 horas, se dará inicio a la sesión en la Sala de la Cámara de Diputadas y Diputados para discutir la acusación constitucional contra el ministro de Desarrollo Social, Giorgio Jackson. El miércoles, la comisión revisora –que estaba compuesta por tres parlamentarios oficialistas y dos de oposición– emitió un informe desfavorable al libelo en contra del secretario de Estado. Con ese trámite a su favor, tanto el ministro Jackson como el Gobierno en general se jugarán el todo por el todo en la cuestión previa, para evitar así que la acusación pase al Senado, donde podría agarrar vuelo debido a las malas relaciones que cosechó Jackson durante su paso por la Segpres.
El diputado y jefe de bancada de la Democracia Cristiana, Eric Aedo, lo ilustraba este miércoles en Radio Pauta. Frente a la posibilidad de que avance el libelo contra el ministro Jackson, aseguró que «representa a la persona que quiso eliminar el Senado. Está pedido por el Senado (…). Si es aprobada la acusación contra Jackson, no tengo duda que en el Senado se va a ratificar», señaló el diputado Aedo.
Para que la acusación se haga efectiva, se necesita mayoría absoluta de los presentes. En caso de que haya asistencia completa, significa que la acción impulsada por el Partido Republicano se aprobaría con 78 votos. El oficialismo –que se espera alineado– cuenta con el apoyo de 70 diputados. La oposición, en cambio, con 74 votos, y ya se sabe que existen algunos legisladores que no favorecerían el libelo, ya sea con su voto en contra o por medio de su abstención.
Las conversaciones entre el Gobierno y representantes de la Cámara Baja se han mantenido durante toda la semana. Se pudo ver en el Parlamento a la ministra de la Secretaría General de la Presidencia, Ana Lya Uriarte, junto al ministro Jackson en la sesión en Sala del Senado para la aprobación del proyecto de envejecimiento digno, activo y saludable, instancia que se aprovechó para conversaciones de pasillo con parlamentarios, tanto oficialistas como de oposición.
Además, desde el Ejecutivo no han perdido la oportunidad para declarar que la acusación surgida desde el Partido Republicano carece de asidero jurídico y político: “Hemos establecido una serie de conversaciones con distintos parlamentarios y parlamentarias para reafirmar como Gobierno nuestra posición de irrestricto apoyo al ministro Jackson. En tanto, los hechos que el Partido Republicano ha pretendido enmarcar en una acusación constitucional como infracciones de carácter jurídico, no son tales”, señaló la ministra Uriarte, durante la mañana del miércoles.
Además, y como parte de su estrategia de defensa, el ministro Giorgio Jackson anunció que invocará la cuestión previa, para que la acusación sea desechada sin que se discuta su fondo. Se trata de un mecanismo que cuestiona los argumentos de la acusación constitucional y plantea que esta no cumple con las condiciones reglamentarias para llevarse a cabo. De aprobarse esta instancia, el “fondo” del libelo no se analiza y, por ende, se tendrá por no interpuesta la acusación. Respecto a los plazos, este jueves, a partir de las 10:00 horas, la Cámara Baja debatirá la cuestión previa y, eventualmente, el fondo de la acusación. Para aprobar, se requiere de la mayoría de los parlamentarios presentes, y de ser así, pasará al Senado, a fin de que este actúe como jurado para resolver el asunto, por medio de una votación con quórum de dos tercios.
Con 3 votos en contra, 1 a favor y 1 abstención –del diputado UDI Joaquín Lavín León–, ayer la comisión revisora despachó con informe negativo la acusación contra el titular del Ministerio de Desarrollo Social. Al respecto, el jefe de la bancada del Partido Socialista, Marcos Ilabaca, detalló que “la exposición del diputado Lavín ha demostrado que claramente no existe ningún fundamento jurídico ni político”, en relación con el libelo que se someterá a votación este jueves en la Sala de la Cámara. Cabe recordar que el voto de dicha comisión no es vinculante, pero se considera como una propuesta a la Sala, en este caso para rechazar la acusación constitucional.
Con respecto a esto, Karol Cariola (PC), quien integró la comisión revisora, hizo referencia a la abstención de su contrario UDI, Joaquín Lavín León, que se abstuvo de aprobar el informe: “El diputado de la UDI en esta comisión se abstuvo, porque no consideró que eran suficientes los argumentos para sostener esta acusación constitucional”.
Por su parte, la diputada y expresidenta de Revolución Democrática, Catalina Pérez, se sumó a las palabras de su par oficialista y acusó al Partido Republicano de presentar una acusación “que no cumple con el más mínimo estándar de uso de estos instrumentos constitucionales, lo que evidentemente interpela a quienes, más allá de la opinión sobre la gestión del ministro, son respetuosos de la institucionalidad”. Además, dijo creer que “parte de la derecha democrática se ha distanciado de esta acusación”.
Mientras la comisión revisora terminaba de elaborar su informe este miércoles, algunos legisladores de oposición comenzaron a transparentar su voto, como el diputado Christian Moreira (UDI), quien informó que se abstendrá, mientras que en los pasillos del Congreso Nacional corría el rumor de que en Renovación Nacional también podrían existir descolgados. Los principales apuntados serían Eduardo Durán, Andrés Longton, Ximena Ossandón, Hugo Rey y Andrés Celis.
El diputado Durán comunicó la duda públicamente, pero enfatizó que esperará a la determinación del partido este jueves para tomar su decisión. “El tiempo está complicado políticamente, lo que no da espacio para permitirnos esto. El Ejecutivo está peleado con el Judicial, con el Parlamento, y seguir tensionando el ambiente en estas condiciones no me parece lo más adecuado. Las causales tienen poco sustento, pero la decisión la tomaré mañana”, puntualizó.
En la Cámara se comenta que es muy difícil para la oposición contar con los votos necesarios, y varios dan por hecho que se caerá la acusación contra Jackson incluso en su primera etapa –la cuestión previa–. Desde RN indican, como bancada, que van a rechazar la cuestión previa. En tal caso, si se pasa al fondo, tendrán una reunión para tomar una decisión a nivel de bancada, que probablemente –adelantan– será aprobar la acusación constitucional.
Parlamentarios de la misma tienda aseguran que Durán, Longton, Ossandón y Rey manifestaron tener dudas sobre aprobar la acusación desde el principio. Sin embargo, hay quienes advierten que puede haber consecuencias –como perder puestos en comisiones– si, una vez tomada la decisión como bancada, ellos optan por el camino contrario. Incluso, hay quienes afirman que se le habría pedido a uno de los que podría rechazar el libelo que saliera de la Sala durante la votación, para no perjudicar el voto alineado del resto de su bancada.
Al interior de Renovación Nacional explican que ven la acusación contra el ministro Giorgio Jackson como un golpe ideológico al Gobierno, por ser una persona tan cercana al Presidente de la República. Sin embargo, al menos si llegara al Senado, señalan creer que algunos parlamentarios de dicho partido podrían estudiar rechazarla, con el objetivo de cumplir un “rol opositor responsable”.
No obstante, desde el Partido Republicano han comenzado a surgir voces de advertencia en contra de la bancada de diputados de Renovación Nacional, respecto a que su eventual descuelgue del libelo que se vota hoy podría incidir en la votación de la acusación contra la autoridad de Gobierno. Esto, considerando las malas relaciones entre Chile Vamos y los republicamos a raíz de varios episodios recientes, como el apoyo de algunos de los parlamentarios de RN al acuerdo político que dio paso al nuevo proceso constituyente.
La Moneda, por su parte, espera expectante el resultado de esta votación. Y es que durante la tarde de hoy jueves, cuando se proyecta que ya se conocerá la determinación de la Cámara Baja, el Presidente Gabriel Boric encabezará un comité político en el Palacio Presidencial de Cerro Castillo, en Viña del Mar, donde participarán los ministros del Interior, Carolina Tohá; Segegob, Camila Vallejo; Hacienda, Mario Marcel; Segpres, Ana Lya Uriarte; Trabajo, Jeannette Jara; y de la Mujer y la Equidad de Género, Antonia Orellana
Otra suerte –señalan– es la que podría correr la exministra de Justicia, Marcela Ríos, cuando se vea la acusación constitucional que presentó Chile Vamos en su contra, la que será votada el miércoles 25 de enero. Esto, explican, porque no tendría sentido rechazar una acusación presentada por la coalición de la que son parte, y porque este libelo tiene como objetivo principal aprovechar las declaraciones que dará la exsecretaria de Estado para recabar información sobre desprolijidades en el proceso de selección y anuncio de los indultos, siendo la meta final lograr presionar al Gobierno para que deje sin efecto, al menos, los indultos de Juan Castillo y del exfrentista Jorge Mateluna.
