Se abre apetito por el “centro” tras victoria comunista en primaria presidencial

El triunfo de Jeannette Jara, candidata del Partido Comunista, en las recientes elecciones primarias del oficialismo desató un renovado interés por el denominado “centro político”, un espacio que adquiere protagonismo en el escenario electoral y que atrae la atención no solo de los grandes bloques, sino también de independientes y partidos fuera de las coaliciones tradicionales.

La última encuesta Cadem, publicada tras el resultado del domingo, confirmó un escenario que algunos ya anticipaban: Evelyn Matthei, carta de Chile Vamos, en caída libre tras perder nueve puntos, y Jeannette Jara y José Antonio Kast (Partido Republicano) pasarían a segunda vuelta. Esta configuración, también anticipada en sondeos anteriores, abrió el apetito por un espacio que —según aseguran sus aspirantes— hoy se muestra vacío y cotizado.

La Democracia Cristiana (DC) ha sido el partido que históricamente se ha adjudicado el centro político chileno. Hoy, en medio de una crisis interna, se ve obligada a buscar un “botón de pánico”.

Lejos de sus históricos aliados de la centroizquierda, la reacción de la DC fue rápida y categórica. Tras nominar inicialmente a su presidente, el diputado Alberto Undurraga, quien se bajó de la carrera, la postura fue clara: “No se puede apoyar una candidatura del PC”, señaló Undurraga a la prensa tras conocer los resultados. “La gente de centro y centroizquierda se queda sin representación para las próximas elecciones presidenciales, por ahora, y eso cambia el escenario político desde hoy”, agregó.

La Junta Nacional de la DC, que había definido su apoyo a Carolina Tohá —quien sufrió una fuerte derrota en la primaria—, se reunirá este lunes para evaluar su posición tras la victoria de Jara. Nicolás Preuss, consejero nacional del partido, reiteró la distancia con la carta comunista: “No vamos a estar con Jeannette Jara, pensamos diametralmente opuesto, no somos lo mismo”.

Pese a que inicialmente parte de la militancia afirmó que no había un plan B, la Falange ya baraja nuevas alternativas para ocupar ese “espacio político”. Nombres como el del exintendente Marcelo Trivelli —exmilitante DC— y el expresidente de la ANFP, Harold Mayne-Nicholls, ambos inscritos ya como candidatos independientes, suenan con fuerza. Preuss manifestó que Mayne-Nicholls “es quien podría unirnos mejor, y me la jugaré para que la DC lo apoye”.

Mayne-Nicholls, considerado por algunos como “el otro ganador” de estas primarias, celebró —a minutos de ser publicado el resultado de la primaria— haber superado con anticipación las 20 mil firmas necesarias para inscribir su candidatura, y afirmó que “aceptaría el apoyo de un partido como la DC, pero sin perder su independencia”.

Por su parte, sectores del partido han expresado su disposición a apoyar candidaturas independientes, aunque no existe un acuerdo cerrado. “Las opciones ahora son múltiples”, apuntó Preuss, consultado por El Mostrador.

📌 – ¡Solo tengo palabras de agradecimiento para todos y todas!

Estamos muy contentos por este logro. Queríamos alcanzar esta meta el martes. ¡Y nos adelantamos gracias a uds!

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— HaroldMayne-Nicholls (@MayneNicholls) June 30, 2025

Los discursos oficialistas de la noche del domingo estuvieron cargados de llamados a la unidad en todos los frentes. Ante esto, el presidente regional metropolitano de la DC, Rodrigo Albornoz, remarcó que los partidos del Socialismo Democrático se ubicarán presidencial y parlamentariamente cerca de Jara, “no existiendo, al parecer, posibilidad alguna de privilegiar una lista parlamentaria con la DC”.

Albornoz contó a El Mostrador que la DC quería estar presente en la celebración de Tohá, pero “no solo no ganó, sino que además la baja participación relata el nivel de fracaso de un gobierno, que mi partido no ha tenido autonomía para ser crítico”. El dirigente falangista desliza que “tal vez la izquierda invite a la DC y sus parlamentarios querrán sumarse, aunque ni siquiera sea una negociación, sino que un mero contrato de adhesión”.

El dato que más preocupa a varios actores es la baja participación: 1,4 millones de votantes, un 20% menos que la primaria entre Gabriel Boric y Daniel Jadue. Para Marcelo Trivelli, esto evidencia que “la ciudadanía no vio en esta elección al próximo presidente”. Según él, Jara “creció al privilegiar su conexión emocional con la ciudadanía, pero se vio obligada a ocultar la rigidez ideológica de su partido”.

Trivelli subraya que la solución no está en los extremos, dado que “el oficialismo se inclina a la izquierda y la derecha radicalizada ya supera a Matthei”, dejando un espacio “gigantesco” que busca ocupar con un proyecto “que busca sacar los tapones que tienen al país estancado para liberar su potencial y poner el crecimiento económico al servicio de las personas y del cuidado de nuestra casa común”.

El interés por ese centro también se refleja en otras candidaturas independientes y partidos emergentes. Franco Parisi, fundador del Partido de la Gente, confirmó su intención de competir y aseguró a la prensa que “el centro es el eje de la discusión y ahí, el PDG y yo en el gobierno, vamos a lograr la unidad nacional…”. De manera similar, el Partido Ecologista Verde con Félix González, y la senadora Ximena Rincón, presidenta del partido Demócratas, también apuntan a captar ese electorado.

El centro “es un mundo que puede definir la próxima elección presidencial, por lo tanto todos están buscando acercarse a quienes representamos a ese mundo”, dijo recientemente la senadora Rincón a Radio Bío-Bío.

Junto a ellos, el eterno candidato Marco Enríquez-Ominami y el profesor Eduardo Artés (Partido Comunista Acción Proletaria) siguen reuniendo firmas para inscribirse, aumentando la lista de opciones que podrían estar en la papeleta de noviembre.

El apetito también crece en las coaliciones tradicionales. Chile Vamos y su candidata Evelyn Matthei han enfocado su estrategia en avanzar hacia el centro político. En las últimas semanas, la aspirante ha insistido en la necesidad de “dejar la ideología de lado, salir del clivaje derecha-izquierda y llegar al 62% del rechazo de 2022”.

Esta táctica se fortalecería aún más tras la victoria de Jara, ya que Matthei buscaría atraer al electorado que no está dispuesto a apoyar al PC, un desafío que también asumió Jeannette Jara. Si bien la candidata oficialista ha asegurado que no está en sus planes renunciar a su partido, ha dicho que, de ganar, trabajará con toda la centroizquierda y hará gestiones para sumarlos.