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Los vínculos del nuevo subsecretario de Redes Asistenciales con el caso Frei Montalva

En 2000 el funcionario negó públicamente la existencia de la autopsia hecha por dos patólogos del Hospital de la UC al ex Mandatario. Pese a que uno de los médicos que la practicó, Sergio González, le contó que la tenía en su escritorio. Castillo -un hombre cercano a la UDI- no hizo ninguna gestión para informar a la familia, que sólo pudo tener el documento en 2003 cuando la incautó el magistrado. Carmen Frei ha insistido en que la UC nunca ha mostrado interés de colaborar con la investigación, donde hay seis personas procesadas, entre ellos dos especialistas de la casa de estudios.


El recién nombrado subsecretario de Redes Asistenciales, Luis Castillo, tiene un vínculo desconocido con el proceso que sustancia el ministro Alejandro Madrid por el homicidio del ex Presidente Eduardo Frei Montalva.

Castillo fue interrogado por el magistrado, a raíz de una serie de declaraciones hechas en 2000 donde aseguró que la autopsia del ex Mandatario no existía en el Hospital Clínico de la Universidad Católica, donde el ahora subsecretario trabajaba.

Así consta en uno de los escritos que presentaron los querellantes de la familia Frei al juez, el año pasado (ver documento anexo).

La historia de la participación de Castillo en este caso, donde prestó declaración como testigo, comenzó cuando el 11 de octubre de 2000 la entonces senadora Carmen Frei, aprovechando la hora de incidentes, manifestó las dudas sobre la muerte de su padre, en el marco del libro publicado por el historiador Cristián Gazmuri (en documento anexo: Capítulo 1 del libro Crimen Imperfecto).

La dama del pentotal

Los medios comenzaron a llamar al centro asistencial de la UC a la periodista Ana María Bolumburu, para pedir una opinión oficial. Lo que en aquellos años no sabían los reporteros es que la mujer está emparentada con Eliana Bolumburu, una enfermera de la DINA que aplicaba torturas y venenos a los detenidos, conocida como “la dama del pentotal”.

La versión que buscaban los reporteros fue entregada por el propio Castillo quien negó la existencia del documento, toda vez que indicó que, si hubiese algo, debiera pedirlo la propia familia.

[cita]Uno de los doctores que hizo la autopsia de Frei Montalva reconoció haberle contado a Castillo. Después de la conversación tomó el documento y lo guardó en su escritorio.[/cita]

Debido a la negativa del hospital, la familia Frei logró en 2000 que los detectives iniciaran una investigación en el Instituto de Salud Pública  desde dónde emanaron una serie de datos respecto a los venenos usados por la dictadura para deshacerse de los indeseables del régimen que se iría vinculando a la muerte de Frei (en documento anexo: Capítulo 17 del libro Crimen Imperfecto).

Archivo de hospital UC

Sin embargo, a fines de 2002, el abogado Álvaro Varela, a través de una persona recibió la información de que la necropsia estaba virtualmente escondida en el archivo del hospital de la UC, documento que nunca fue conocido por la familia, desde el 21 de enero de 1982 cuando fallece Frei Montalva.

La familia ha insistido en reiteradas oportunidades que las autoridades de la UC no han mostrado un ánimo de colaboración con la causa, sobre todo porque recién en 2003, el magistrado pudo realizar la incautación de los documentos, donde constaban los análisis a las vísceras del ex Presidente, pese a que los conocían desde antes de su existencia.

Una vez que el juez tuvo los papeles en su poder, se conoció por primera vez que la autopsia fue realizada por los patólogos Helmar Rosenberg y Sergio González, respecto de quienes Madrid, años más tarde comprobaría que, además mantuvieron durante toda la dictadura militar serios vínculos con uno de los líderes de la Colonia Dignidad, Hartmut Hopp como también el hospital como institución.

Detalles de la declaración de Castillo

Castillo le relató al ministro que efectivamente recibió la petición de los periodistas en 2000, pero agregó un detalle: el mismo González le reveló la existencia de la autopsia y le pidió instrucciones, respondiéndole que si la familia no la pedía entonces nada se podía hacer.

Cuando fue interrogado por el magistrado e inquirido sobre este episodio y si había realizado alguna gestión para informarle a los deudos y agilizar la investigación, Castillo respondió: “no realicé ninguna gestión ni encomendé hacer tampoco nada por cuanto no recibí ninguna petición sobre esto, nadie me lo pidió”.

Pero el tema es aún más complejo para Castillo, ya que González en su declaración reconoció haberle contado, pero además afirmó que tomó la autopsia y la guardó en su escritorio, después de esa conversación.

“Lo anterior significa, que el doctor González no sólo negó por los canales institucionales correspondientes la circunstancia de haberse intervenido el cadáver de don Eduardo Frei Montalva, sino que, además, tomó la precaución expresa de guardar personalmente el Informe de Autopsia Nº 9/82; ello, no pudo haber tenido otra intencionalidad más que asegurar su secreto”, señala el escrito al que tuvo acceso este diario.

De hecho, en 2004 el ministro Madrid comprobaría que la autopsia de Frei había sido adulterada.

Castillo es un hombre cercano a la UDI, según publicó El Mercurio en su edición de ayer, quien fuera nombrado en el cargo, luego que renunciara Giovanna Gutiérrez, por diferencias con el ministro del Ramo Jaime Mañalich, la que se suma a la del superintendente de Salud, Vito Sciaraffia.

La participación de Castillo en el caso, es un antecedente más respecto de la actitud que ha tenido la UC para tratar de dificultar la investigación del ministro Madrid.

Y no sólo es el hecho de la negativa sobre existencia de la autopsia. En diciembre y enero pasados, el doctor Enrique Paris, jefe del Departamento de Toxicología del hospital, criticó el auto de procesamiento dictado por el ministro Madrid que afectó a los patólogos de la UC, Rosenberg y González como también los resultados de los peritajes, sin siquiera conocer el contenido de los mismos.

En enero de este año en tanto, con las conclusiones de los análisis en mano, los que le fueron allegados por la periodista de El Mercurio, Pilar Molina, volvió a la carga. Para ambas embestidas mediáticas, contó con la autorización del entonces decano de Medicina y hoy rector Ignacio Sánchez, según ambos lo reconocieron en declaraciones prestadas ante la Policía de Investigaciones, tras una petición de la familia Frei.

El abogado querellante Juan Pablo Hermosilla insistió recientemente en una entrevista otorgada a la revista Qué Pasa, que a la UC incluso podrían caberle responsabilidades criminales en el tema y anunció la evaluación de una querella criminal.

Actualmente, los procesados en el Caso Frei como autores son el ex chofer del ex presidente, Luis Becerra, el ex CNI Raúl Lillo y el médico Patricio Silva Garín; en calidad de cómplice el ex médico de la DINA Pedro Valdivia; y en calidad de encubridores los patólogos de la UC Helmar Rosenberg y Sergio González.

Este diario intentó obtener una versión de parte de Castillo en el Minsal, pero no hubo respuesta.

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