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La resurrección de Yuraszeck: la U lo coloca otra vez en la cima del poder


Tal como el Matador, ídolo de la U, José Yuraszeck metió un gol de volea y media cancha. Se encumbra a la presidencia de Azul Azul en el momento de mayor gloria del club.

Un sitial que le dará toda la visibilidad que perdió con el escándalo de Chispas y una popularidad imposible de alcanzar en los negocios. Miles de chilenos lo vieron exultante, vestido con la polera de la U y ondeando la bandera en el bus que llevó a los jugadores al Hotel Intercontinental después de ganar la Copa Sudamericana. Una imagen que se repitió cuando el equipo fue invitado a La Moneda y recibido, junto a los directores Carlos Alberto Délano y Federico Valdés, por el Presidente Sebastián Piñera. Así, olvidaron que el mandatario, en su momento criticó a Yuraszeck, cuando se vio salpicado inicialmente por el caso Chispas.

En su afán por alcanzar el poder va dejando heridos en el camino. Uno de ellos es Carlos Heller, el principal accionista de la concesionaria Azul Azul, quien fue excluido de la visita a La Moneda. Ayer después de la junta de accionistas en la que se designó una lista de “consenso”, Heller y su hermanastro Gonzalo Rojas se fueron en su propio avión a Mendoza a ver el partido de la U con Godoy Cruz. En tanto, José Yuraszeck y Carlos Alberto Délano tomaron un vuelo comercial. Faltaba apenas una hora y cuarto para el despegue del vuelo y quien será nombrado presidente el próximo miércoles 11 de abril —cuenta con seis de 11 votos en el nuevo directorio— habló frente a las cámaras como si el tiempo le sobrara.

Mientras era presidente de Enersis se peleó con los Luksic, quienes eran accionistas de Endesa y lo acusaron de privilegiar los intereses de Chilectra, donde Enersis tenía una propiedad mayor, por sobre los de Endesa en las negociaciones tarifarias. Tampoco se llevó bien con los Matte. Enemistarse mientras se tiene el poder es una cosa, pero como el poder no es eterno, cuando Yuraszeck lo perdió, le pasaron la cuenta.

Fue marginado del consejo de la Sofofa, debió salir de la comisión política de la UDI para no afectar la campaña del entonces candidato Joaquín Lavín, fue criticado en los círculos empresariales por faltar a la ética. La que prometía ser la Operación del Siglo —la venta de Enersis a Endesa España en US$ 1.500 millones— se convirtió en el Escándalo del Siglo cuando se hizo público que Yuraszeck y un grupo de 14 ejecutivos recibirían US$ 500 millones por un 0,06% de las acciones serie B de Chispas. Mientras, los de la serie A obtendrían US$ 1.000 por su paquete de acciones, es decir, 800 veces menos por papel. La Superintendencia de Valores aplicó, en 1997, la multa más alta de la historia: 2,2 millones de UF a José Yuraszeck y otros cinco ejecutivos.

Enersis, que nació de la privatización de Chilmetro —la antigua Chilectra— y agregó a sus activos a Endesa y Transelec, subió su valor bursátil de US$ 100 millones a US$ 5.000 millones. Amplió su presencia a cinco países de Latinoamérica, llegando a controlar el 17% del negocio eléctrico de la región.

El excesivo protagonismo —que lo llevó a ser bautizado como el zar de la electricidad— y su manera de hacer las cosas le pasaron la cuenta y terminó convertido en el símbolo de la operación.

Desapareció, pero no por mucho tiempo. La compra de Sal Lobos en 2001 junto a varios de los ex ejecutivos del holding Enersis y Citigroup lo hizo regresar a las pistas y a los medios. Gracias a un exitoso proyecto de expansión internacional los US$ 95 millones pagados por la empresa se transformaron en US$ 485 millones en 2008. Lejos, el mejor negocio después de Enersis.

Su inversión en CIC junto a León Vial ha tenido altos y bajos, pero a nivel futbolístico la sociedad de ambos ha complicado a Vial. Como accionista de Colo Colo le han enrostrado su relación de negocios con Yuraszeck, no sólo por ser clubes rivales, sino porque no olvidan el episodio de las Chispas. Tuvo un poco lucido paso por el negocio del transporte público con Redbus, que terminó vendiendo a una compañía francesa. Y la Viña Undurraga atraviesa por un etapa importante de crecimiento en la que ha duplicado sus ventas y hectáreas.

No es casual que Yuraszeck haya llegado a la cima de la U. Huele el poder como un león a su presa. Al poco tiempo de haber entrado a Azul Azul se ubicó en una posición clave: la Comisión de Fútbol, que elige a los jugadores. Fue uno de los operó para sacar a Harold Mayne-Nicholls de la ANFP y dicen que ejerce gran influencia sobre su sucesor, Sergio Jadue. Es un secreto a voces en el mundo del fútbol que se ha ocupado de un tema muy relevante: la Comisión de Arbitrajes de la ANFP, que designa a los árbitros para cada partido e impone las sanciones por mal desempeño. Renunció el presidente de esa comisión, uno de los mejores árbitros del mundo, por desacuerdos con Jadue.

Yuraszeck vive un segundo tiempo que para muchos tiene olor a revancha.

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