Publicidad

De un liberal a Vlado Mirosevic

Por: Lucas Blaset, Amplitud


Señor Director:

Recientemente, el diputado Vlado Mirosevic junto a Luis Felipe Ramos, presidente del Partido Liberal, escribieron en conjunto un artículo en El Mostrador, donde mencionaban la diferencia entre liberales y libertarios asociando a estos últimos con Jose Piñera —hermano del ex-presidente Sebastian— con la ideología llamada «anarco-capitalismo» y ubicándolos, tanto a José, como a dicha ideología, a la derecha de la UDI y del Partido Republicano de Norteamérica.

Primero, una pequeña reseña histórica de la palabra «Libertario», palabra que se desprende de su homónima de habla anglosajona «libertarians». Mirosevic y Ramos están en lo correcto, cuando dicen que es sinónimo del concepto político «anarquista» a secas, que se comenzó a utilizar en Europa, para remplazar a esta última, por la vinculación con la violencia que conllevaba la palabra anarquista.

Dentro del anarquismo, existen muchas corrientes, algunas comunitaristas o sindicalistas, ecologistas o primitivistas, otras feministas o Queer, otras tecnológicas o transhumanistas, otras georgistas o Agorista como también una corriente individualista o capitalista.
Incluso para sorpresa del diputado, existe un anarquismo, con teorías económicas que mezclan el comunismo con el capitalismo, llamado anarquismo-mutualista. Además en algunos países, trabajan todos en conjunto o al menos en causas comunes específicas.

Pero para simplificar, hay dos grandes ramas, los anarco-socialistas de bandera negra (anarquismo) con roja (socialismo) y otros los anarco-capitalistas negra (anarquismo) con amarillo (capitalismo). Muchos de ellos, en ambas corrientes se hacen llamar libertarios, siendo en ambos casos bien utilizados, porque es sinónimo libertario con anarquista.

En Chile, a diferencia del resto de América latina, nuestra influencia no sólo es europea, sino también tenemos una fuerte influencia norteamericana, especialmente en las últimas cuatro décadas. Por lo tanto, los conceptos se mezclan más, ya que si en España, Francia o Argentina, te refieres a los libertarios, la gente asume inmediatamente que hablas de anarco-comunistas, mientras que en USA, asumen que hablas de anarco-capitalistas, en Chile, se puede interpretar de ambas maneras.

El Frente de Estudiantes Libertarios, que es aliado de la Confech, de la UNE y de los Autónomos de Gabriel Boric, quienes alcanzaron la presidencia de la FECH con Melissa Sepúlveda durante el 2014, son claramente anarquistas de corriente socialista, lo mismo ocurre con el naciente movimiento, también potencial aliado de Boric y Giorgio Jackson; Izquierda Libertaria.

Por otro lado, han habido movimientos menores como Sociedad Libertaria, Generación Libertaria y Sector Libertario, entre otros, que son claramente de corte más Anarco-Capitalista, muchos de ellos ligados intelectualmente a la Fundación para El Progreso de Axel Kaiser.

Cuando el Diputado Mirosevic, hace esta artificial diferencia entre Liberales y Libertarios (capitalistas), no sabe que genera el mismo problema de términos con sus potenciales futuros socios —Jackson, Boric y el resto de la izquierda, fuera de la Nueva Mayoría, incluida la Izquierda libertaria— Además, él habla del término norte americano «Liberals» que en el mundo hispanohablante se asocia mucho más al término de Progresismo, que calza con la propia definición que Mirosevic y los suyos le dan al nuevo partido Liberal, que es la de «Liberal-Progresista».

Creo que los términos más correctos, para diferenciar las corrientes políticas de centro izquierda, que se relacionan al Liberalismo y que no son ni socialdemócratas ni progresistas, debería ser el de Liberalismo-Igualitario, en los que cabrían Red Liberal, de Cristobal Bellolio, Ciudadanos de Andrés Velasco y siendo muy generoso con el concepto, el Partido Liberal de Vlado y Luis Felipe. Mientras que el concepto para agrupar a los Liberales más Clásicos hasta los anarco-capitalistas, debería ser Liberal-Libertarios.

Por ultimo, destacando que dicha columna, fue para quitarle el concepto de Liberal, a Jose Piñera, debemos recordar que en su franja presidencial de 1993, él hablaba de gobernar con los valores de la Biblia, defendía la dictadura militar, entre otras cosas que lo alejan, no sólo del concepto de liberal, sino también de libertario, por lo que la comparación más a la derecha de la UDI, debería estar más asociada con el movimiento del nieto de Augusto Pinochet, «Por mi Patria», o en el caso norteamericano con el Tea Party o Donald Trump, que con Ron y Rand Paul o el Libertarían Party.

Esto sin embargo, no quita que sea un férreo defensor de la libertad económica, cuestión que a mi modo de ver, deberían tener en menor o mayor grado, todos los liberales. Pero es una condición necesaria, no así suficiente, ya que para ser un liberal, se tiene que además —y no sólo exclusivamente— defender la libertad, en el área moral y política. Cosa que claramente «Pepe» Piñera no comparte. Mientras que Vlado debería mostrar mayor compromiso con la libertad económica, como muestra con la libertad moral y política, para poder llamarse a sí mismo y a su partido: Liberales.

Lucas Blaset
Amplitud

Publicidad

Tendencias