Las últimas elecciones mostraron claramente que el paradigma bajo el cual se sostiene la política cambió, se trata de un proceso de cocreación con los ciudadanos, de avanzar en causas comunes, de construcción desde lo local y no al revés. A ratos pareciera que hay poco espacio para la reflexión y análisis de la situación política actual y que sigue primando el premio de consuelo o la cuadratura de caja por sobre los intereses de las regiones, donde Aysén siempre es un alternativa.
El pasado domingo 30 octubre, vía El Mercurio de Santiago, el vicepresidente nacional del Partido Socialista declaró que, postanálisis resultados de elecciones municipales, ha tomado la decisión de postular al Senado. La decisión adoptada por Camilo Escalona no deja de sorprender, más aún cuando afirma que Aysén figura como su primera opción, en tanto tiene una “buena llegada”, según sus cercanos.
Sobre la elección municipal, los expertos han señalado que debería llamar la atención la baja participación de los ciudadanos en esta elección, lo que evidencia la falta de confianza en la institucionalidad política en general, el principal problema de nuestra democracia. Por lo mismo, los problemas actuales no se pueden seguir abordando de la misma manera, esa fue la lección que dejó esta elección y razón por la cual no deja indiferente la notificación de Camilo Escalona.
El tema de la desafección de los ciudadanos con la política es un déficit del cual los liderazgos políticos tradicionales parecen no querer hacerse cargo y persisten en sostener que los problemas regionales se abordan con las mismas figuras y un modelo de selección de candidatos cuestionado por la mayoría de los chilenos.
Al respecto, un breve repaso de algunos candidatos y senadores de la Concertación de Partidos por la Democracia electos en Aysén.
En el periodo 1990-1994, fue electo senador el abogado Hernán Vodanovic (PS), quien terminó como ministro en el Tribunal Constitucional y al menos públicamente no retornó a Aysén. Luego, en las elecciones parlamentarias de 1993, Adolfo Zaldívar (DC) salió electo senador y fue reelecto en las elecciones de 2001 por otros ocho años. Es conocido que el fallecido senador terminó en el PRI y nombrado Embajador de Chile en Argentina por el Gobierno de Sebastián Piñera. Posteriormente, y luego que la candidatura de Ximena Rincón no convocará a los militantes DC de la región (lo que provocó finalmente que ella se presentara como candidata a senadora en la Región del Maule), el año 2008 es electo senador por Aysén Patricio Walker, quien provenía de la Región de Coquimbo.
[cita tipo= «destaque»]El tema de la desafección de los ciudadanos con la política es un déficit del cual los liderazgos políticos tradicionales parecen no querer hacerse cargo y persisten en sostener que los problemas regionales se abordan con las mismas figuras y un modelo de selección de candidatos cuestionado por la mayoría de los chilenos.[/cita]
En esa misma elección, su adversario, el militante Radical Ernesto Velasco, después de reconocer su derrota se comprometió a crear una Fundación en la Región para trabajar temas de desarrollo y vinculados al Agua, no obstante, esa Fundación nunca nació.
Por último, el senador en ejercicio deberá medirse el próximo año y vale la pregunta si después de pasar estos ocho años con domicilio en Lo Barnechea –Santiago–, en caso de no ser reelecto, ¿volvería a ejercer alguna tarea propia de nuestra región sin escaño garantizado?
Enfrentamos las próximas elecciones senatoriales con la misma lógica. Por eso es que no puede pasar inadvertido el reciente anuncio del vicepresidente del PS, desde Santiago, a través de un medio nacional, y aún bajo la duda de si será Aysén o El Maule –como si fuera lo mismo–, se anuncia una candidatura senatorial. Escalona fue senador por la Región de Los Lagos, perdió en el Bío Bío el año 2013 y hoy se anuncian sus servicios políticos para Aysén a partir del análisis electoral realizado y no bajo la perspectiva de las necesidades de las regiones que se entienden a partir de sus particularidades y de la experiencia de habitar un territorio determinado.
