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Mineduc estima en al menos US$400 millones el lucro anual de colegios subvencionados Cifra representa la diferencia entre ingresos y gastos de los sostenedores

Mineduc estima en al menos US$400 millones el lucro anual de colegios subvencionados

Nicolás Sepúlveda
Por : Nicolás Sepúlveda Periodista de El Mostrador
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Tomando datos del Servicio de Impuestos Internos, la cartera liderada por Nicolás Eyzaguirre estimó el lucro potencial que tendría este tipo de establecimientos, marcando una gran distancia con estimaciones hechas por el CEP, desde donde afirman que el monto es inferior. Otros investigadores aseguran que el total de utilidades que genera el negocio de la educación es incluso superior, tomando en cuenta la suerte de holdings educacionales que algunos sostenedores forman con sus ATE y entidades relacionadas, a donde muchas veces llegan los recursos.


Ha sido una de las grandes interrogantes durante la tramitación de la reforma educacional, ¿a cuánto llega el lucro de los colegios en Chile? Desde diversos sectores se ha acusado que no existen cifras confiables y que es difícil precisar con exactitud cuánto de los recursos que aporta el Estado para la educación de los estudiantes se va en utilidades de los sostenedores privados de los colegios. Pero hay estimaciones.

Hace unas semanas el secretario ejecutivo de la reforma educacional, Andrés Palma, les comentó a los senadores de la Comisión de Educación que el Mineduc manejaba una cifra que se aproximaba al eventual lucro en que incurren los colegios particulares subvencionados con fines de lucro, lo que, hasta ahora, sigue siendo perfectamente legal.

Con datos aportados por el Servicio de Impuestos Internos (SII), el Ministerio estimó en, al menos, US$400 millones anuales los excedentes reportados por los colegios particulares subvencionados con fines de lucro. Esa cifra representa la diferencia existente entre los ingresos –vía subvención estatal y copago– y los gastos que los sostenedores declaran.

De todas formas, en la cartera aclaran que no todos los excedentes pueden ser considerados lucro, ya que parte de estos pueden reinvertirse en años posteriores, sin que sean retirados por los sostenedores. Pero no hay claridad al respecto.

El senador del MAS, Alejandro Navarro, señala que conoce la cifra, pero subraya que se trata de un monto relativo, “porque el Servicio de Impuestos Internos lo que hace es decir cuánto gastan y cuánto reciben los colegios, entonces ahí determinan cuál es la utilidad. Pero puede ser relativo, en términos que puedan existir gastos no declarados”.

Y aclara que “Andrés Palma nos dio a conocer esta información en la Comisión de Educación, pero aún no tenemos acceso a ese informe”.

Ha sido un tema debatido. Un estudio del Centro de Estudios Públicos, de julio de este año, difiere en el monto y asegura que esos excedentes alcanzaron US$133 millones el 2012. Para la investigadora a cargo de ese estudio, Sylvia Eyzaguirre, es muy difícil que todo el excedente de los colegios vaya a parar a los bolsillos de los sostenedores: “¿Cuánto es el posible retiro de excedentes?, son US$133 millones. De este total, es muy difícil que se estén retirando todos estos recursos como lucro, y que nada se reinvierta, porque vemos que los colegios sin fines de lucro y los municipales también tienen excedentes. Entonces, si bien este es el potencial máximo de lucro, en realidad debiera ser bastante menos que eso”.

En el estudio publicado por el CEP se señala que todos los colegios tuvieron excedentes el 2012. La suma de los excedentes de los colegios municipales, subvencionados con fines de lucro y sin fines de lucro, sumó, según ellos, US$233 millones ese año, mientras que los que declaran tener fines de lucro por sí solos llegaron a US$133 millones.

[cita]Ernesto Treviño –director del Centro de Políticas Comparadas en Educación de la Universidad Diego Portales– comenta que es difícil lograr una cifra exacta, aunque a su juicio la cifra del Mineduc es inferior al lucro real que podrían tener los sostenedores.[/cita]

Por lo mismo, para la investigadora la cifra que maneja el Mineduc “está sobredimensionada. El Ministerio publicó estas cifras, pero jamás dijo cómo las obtuvo. Está bien, yo a los US$133 millones, que es el máximo posible de retiro de utilidades, podría sumar el lucro potencial por vía de arriendo, o vía ATE, pero cuando tú miras las cifras de las ATE, es tan poco el monto que se invierte ahí. Lo mismo en los arriendos, cuando tú miras que el gasto en arriendo por alumno es menor en los con lucro que en los sin fines de lucro, cuesta imaginar que se lucre mucho con eso”, declara Eyzaguirre.

Pero no hay consenso. Ernesto Treviño –director del Centro de Políticas Comparadas en Educación de la Universidad Diego Portales–, comenta que es difícil lograr una cifra exacta, aunque a su juicio la cifra del Mineduc es inferior al lucro real que podrían tener los sostenedores.

“Me parece que es muy difícil estimar la cifra de lucro porque no hay un catastro exacto de las escuelas con fines de lucro y tampoco se logra detectar las sociedades que están vinculadas, porque muchas veces los dueños de las escuelas y las personas que tienen ATE forman especies de holdings educacionales. Yo diría que la cifra de lucro es probablemente más elevada que la que están dando, porque hay que considerar la plata que se va a entidades relacionadas que muchas veces los sostenedores tienen con otros Rut”, asegura el académico.

Y aunque Sylvia Eyzaguirre estima “difícil” que los sostenedores lucren mediante los arriendos de los edificios donde funcionan los colegios –“porque el lucro es legal y, por tanto, no hay incentivos para que tengan lucro encubierto”–, Treviño discrepa y argumenta que “la forma más fácil y que está en debate ahora en la ley es la infraestructura de muchos de los establecimientos, que a pesar que las hayan comprado con excedentes provenientes de la subvención, eso igual queda en manos privadas, y lo que termina sucediendo es que los mismos dueños del colegio son dueños también de la inmobiliaria”.

¿CUÁNTOS COLEGIOS LUCRAN?

Según un documento que hace algunas semanas el Ministerio de Educación entregó al Congreso, el 72% de los sostenedores de colegios podrían estar retirando utilidades, lo que equivale a 4.374 colegios.

El mismo documento da cuenta de que la mayor parte de la matrícula escolar en Chile está en colegios que declaran fines de lucro. En total, 1.399.843 estudiantes aparecen matriculados en este tipo de establecimientos, sobre los 1.325.740 que lo hacen en colegios municipales, y los 485.171 que estudian en establecimientos particulares subvencionados sin fines de lucro.

Si esas cifras se cruzan con el estudio publicado por el CEP, se obtiene que el 2012 el 55% de los colegios que tiene fines de lucro –al estar constituidos como sociedades comerciales–, obtuvo excedentes, lo que equivale al 18% del total de colegios particulares subvencionados, y a un 22% de la matricula total del sistema escolar, cerca de 730 mil alumnos.

El documento establece que el excedente promedio por alumno de los colegios particulares subvencionados con fines de lucro llega a $8.400, mientras que el excedente promedio de los mismos colegios asciende a 54 mil dólares anuales, menos de lo que promediarían los particulares subvencionados sin fines de lucro, cuyo excedente sería de 91 mil dólares anuales.

Los mismos datos del CEP, además, dan luces del gasto de los sostenedores en arriendos de infraestructura, algo que ha sido polémico en la tramitación de la reforma educacional en el Congreso, ya que inicialmente el Mineduc intentó suprimir la figura del arriendo, pero luego echo pie atrás, debido a la presión de la DC, la Iglesia y los mismos sostenedores.

Según la información recolectada por Sylvia Eyzaguirre, el 46% de los colegios particulares subvencionados –que abarcan el 56% de la matricula–, reportaron el 2012 gastos en arriendo o adquisición de infraestructura.

Los datos del Mineduc indican que 1.934 sostenedores que declaran fines de lucro arriendan los edificios donde funcionan sus colegios, mientras que solo 980 son propietarios de los mismos.

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