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Ley sectorial de artes escénicas: Un llamado de atención a la institucionalidad cultural Según Consejo de la Cultura esta será la primera ley sectorial que ingresará al Congreso

Ley sectorial de artes escénicas: Un llamado de atención a la institucionalidad cultural

Desde los trabajadores escénicos emana un proyecto de ley que busca reivindicar y dar valor al trabajo de los artistas. Posicionar la cultura y las artes como derechos de la ciudadanía, ligados a la educación y a la construcción de identidad. Además de proteger los derechos laborales de los trabajadores del sector. El borrador ya fue diseñado en conjunto con el CNCA, y está a la espera de una respuesta del Ejecutivo.


En enero la programación artística se dispara, y a ojos de todos los asistentes y participantes de esta pomposa cartelera, se ve un crecimiento mantenido de la cultura y las artes en Chile. Sin embargo, este despegue estacional es sólo eso, de una temporada y no da cuenta de un mejoramiento en las condiciones del arte nacional ni de sus ejecutores.

Frente a esto el Sindicato de Actores de Chile (Sidarte), en conjunto con representantes de las disciplinas escénicas, convocados en la Plataforma de Artes Escénicas, ha trabajado en un proyecto de ley sectorial que se ocupe de esta situación y que valorice la cultura en el país. La presidenta de Sidarte, Andrea Gutiérrez y una de sus directoras, Claudia Pérez, entregaron a El Mostrador Cultura+Ciudad todos los detalles sobre el proyecto de ley de artes escénicas.

Bases del proyecto

Bajo un panorama árido para el desarrollo del mundo de las artes escénicas, se conformó la Plataforma de Artes Escénicas, una instancia que llama a organizaciones representativas de la danza, del circo y del teatro. Y se empezó a trabajar en un proyecto de ley que diera una situación más favorable para el sector completo.

De esta manera se plantearon los lineamientos primordiales de la ley: garantizar el acceso a la cultura, garantizar la creación y la circulación, preservar el patrimonio material e inmaterial de los trabajadores y apuntar hacia la descentralización.

Desde el mismo gremio

Son quince las organizaciones que se unieron para trabajar en conjunto. SIDARTE (Regiones), Sindicato de Circo Tradicional, Sindicato de Danza, Red de Salas de Teatro, Agrupación de Diseñadores, Técnicos y Realizadores Escénicos (ADTRES), Circo del Mundo, Red de Danza, Centro de Alto rendimiento de Circo, Festivales Independientes, SINATTAD, BANCH, BAFONA, SITTIVAL y Sindicato de Artistas Copiapó.

La necesidad de diseñar un proyecto sectorial está relacionada con una búsqueda por diferenciar las artes escénicas del resto de las expresiones culturales. La particularidad de cada disciplina hace que sea necesaria una legislación específica que se adecúe a los requerimientos de cada sector. Así, se les entrega un carácter patrimonial y de derecho social a los trabajadores escénicos.

“La diferencia de esta legislación con las que ya existen, es que estamos hablando de un sector que moviliza personas, es bastante más complejo y requiere otra operativa y nosotros queremos que el Estado se comprometa con esa operativa, no que la entregue a manos de otros”, explican las representantes de Sidarte.

Cultura como un derecho

El acceso, la diversidad de espectáculos y la descentralización son urgentes para acercar a las personas a las disciplinas artísticas. De esta forma, en el proyecto de ley se plantea como un problema de la educación, ya que se debe crear la necesidad cultural de ver artes escénicas. Asegurar el acceso conlleva ser parte de un proceso de cultivo de la identidad y de entregar herramientas para poder mirar el país que se quiere en primera persona.

La cultura siempre ha sido preocupación de segunda categoría para las autoridades. En un contexto en que la educación es central en la agenda política y mediática, las expresiones culturales toman una importancia ligada al desarrollo integral de la ciudadanía. Para el gremio de artistas la cultura debe ser un derecho garantizado por el Estado. Es por esto que una legislación que resguarde a los artistas escénicos también debe resguardar a la ciudadanía.

Santiago no es Chile

En un país centralizado la cultura también sufre sus consecuencias. Las dificultades se intensifican en regiones. “Hay un doble centralismo en la escena nacional, primero con la región Metropolitana se piensa que es todo lo que pasa en el país y hay gente que no tiene acceso. Y el otro es que a las capitales regionales se llevan grandes espectáculos pero eso no significa que llegue a todos”, afirman Gutiérrez y Pérez.

Esta es una situación que el proyecto de ley sectorial busca combatir. Entre sus líneas está acercar la cultura a toda la población, por lo que hacen un diagnóstico que muestra un amplio sector de la realidad chilena sin acceso. Para las representantes de Sidarte, los gobiernos regionales y los municipios deberían sensibilizarse y hacerse cargo de las condiciones.

Crear un registro patrimonial

Dentro de los ejes del proyecto se encuentra la creación de un registro nacional de trabajadores de las artes escénicas, que permita contar con un perfil social de cada una de las personas que son parte del rubro. El registro actualmente no existe, y constituiría un aporte en conocer las necesidades específicas de las disciplinas.

“Esto además establece el correcto funcionamiento de la legislación laboral que hay vigente, hace algunas aclaraciones en torno a quién es el empleador en el mundo del teatro y cómo se utiliza esta legislación laboral. Pero la idea nuestra es caminar hacia una formalización del sector desde un punto de vista laboral”, agregan.

Precariedades en el teatro

En el sector del teatro, buena parte de los trabajadores escénicos cuentan con problemas laborales, ya que, según las representantes de Sidarte, no se les valora como trabajadores. Además aparece la realidad de que los costos por montar un espectáculo superan el precio que el público puede pagar, por lo que los mismos equipos teatrales tienen que subvencionar las entradas y pagar por trabajar.

“Lo que soluciona nuestro problema es una legislación que tenga un presupuesto propio que permita equiparar fuerzas entre quienes están tratando de hacerse un espacio en la escena. Los que hoy día se llaman autogestionados es gente que está financiando el trabajo, porque no hay un compromiso de los privados, ni de los gobiernos regionales ni municipios. Hay un encubrimiento de la realidad que existe.”

Trabajo con la institucionalidad cultural

Desde Sidarte explican que han trabajado en conjunto con el CNCA en la redacción del primer borrador del proyecto ley. El trabajo ha sido con el equipo jurídico, los asesores de la Ministra de Cultura y con la jefa de cartera, a quien le presentaron el documento. Además se han reunido con la comisión de Cultura de la cámara de diputados, de quienes recibieron una enorme adhesión.

Aseguran que desde el Consejo el proyecto ha tenido muy buena recepción y los han dejado trabajar libremente, confiando en el conocimiento que tienen sobre el tema. Además han puesto pocas restricciones, aunque no descartan que puedan aparecer más adelante.

“Se lo planteamos al CNCA y estamos en la última etapa y esperamos que pronto sea presentada esta ley por el Ejecutivo. La Ministra dijo que esta iba a ser la primera ley sectorial que va a ingresar al parlamente en este periodo.”

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