Ban ki Moon estará en el país hasta el sábado y contempla visitar la ciudad de Concepción, una de las más golpeadas por el fuerte sismo de 8.8 grados en la escala de Richter del pasado sábado. Su visita se produce en momentos que la jefa de Estado es blanco de críticas por la lentitud de su administración para entregar ayuda a los dos millones de damnificados.
El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, viajará hoy a Chile para expresar su «solidaridad» con los damnificados por el violento terremoto que sacudió el país el pasado sábado, anunció el organismo mundial.
«El secretario general viajará esta noche a Chile para expresar su solidaridad con las víctimas del terremoto», dijo el portavoz de Naciones Unidas, Farhan Haq.
Agregó que Ban tiene previsto reunirse con la presidenta chilena, Michelle Bachelet, a su llegada el viernes a Santiago, así como con el mandatario electo, Sebastián Piñera.
El secretario general del organismo internacional quiere transmitir en sus reuniones con las autoridades chilenas la plena disposición de la ONU a asistir en lo que sea necesario para superar la catástrofe causada por el sismo, que afecto al centro y sur del país , resaltó Haq.
También indicó que Ban se desplazará a Concepción, y que ha sido la ciudad del país más afectada por los temblores debido a su cercanía con el epicentro del terremoto.
El secretario general desea conocer de primera mano la magnitud de la tragedia antes de emprender el sábado el regreso a Nueva York, agregó.
Los responsables de Naciones Unidas han expresado repetidamente en los últimos días su respaldo a la labor del Gobierno de la presidenta Bachelet, que afronta crecientes críticas de los damnificados por la lentitud de la distribución de la ayuda.
La secretaria general adjunta para Asuntos Humanitarios de la ONU, Catherine Bragg, pidió el miércoles respeto a la capacidad de Chile para afrontar la situación que vive el país y aseguró que su Gobierno ha gestionado «muy bien» los problemas generados desde entonces.
Bragg indicó que el organismo mundial colabora con las autoridades chilenas en la obtención de los materiales y equipos que ha solicitado a la comunidad internacional.
Entre estos se encuentran hospitales de campaña, centros autónomos de diálisis, generadores, teléfonos por satélite, sistemas de evaluación de daños estructurales, plantas potabilizadoras de agua y puentes móviles, entre otros.
El fuerte temblor de 8,8 grados en la escala de Richter causó al menos 802 muertos y dejó unos dos millones de damnificados, un millón de viviendas destruidas o afectadas y daños económicos aún no cuantificados.
