“Así como los estudiantes lograron presionar al Gobierno en búsqueda de soluciones, me pregunto si en salud podremos algún día tener una presión de los enfermos y lograr que de una vez por todas se realicen las inversiones que corresponden en esta área”, señala el Dr. Rodolfo Armas Merino, Presidente de la Academia Chilena de Medicina y actual Premio.
Para el Presidente de la Academia Chilena de Medicina, Dr. Rodolfo Armas Merino, no sólo existe una falta en el número de especialistas, como anestesistas y radiólogos, también hay una pésima distribución de médicos en el país.
El profesional recordó que cuando se lanzó el Plan Auge, hoy GES, 36 sociedades médicas plantearon en una carta al Presidente de la República de ese entonces que no había especialistas para enfrentar una reforma sanitaria y además que no sólo había que enfocarse en los pacientes que se acogían al Auge, sino que también en los No Auge. “Todavía estamos esperando una respuesta”, señala el Dr. Armas.
En la actualidad, se estima que alrededor del 75% del total de médicos que hay en nuestro país trabajan en el área privada que representa un 25% de la población. Mientras que en el ámbito de la salud pública, la cifra es a la inversa: sólo un 25% de los médicos de Chile trabajan en el sector público, el cual representa el 75% de la población.
Según un informe de la OCDE, Chile es el penúltimo país en un ranking de gasto en salud en lo que se refiere a la atención médica. Esto significa que se está bajo la media de gasto con relación al Producto Interno Bruto (PIB). Las otras naciones de la OCDE invierten 9,5% del PIB en salud y Chile sólo el 8,4%.
Mejores condiciones laborales y renta
A juicio del Presidente de la Academia Chilena de Medicina, la raíz de este déficit de médicos en el área pública se debe a la falta de incentivos en torno a la calidad del trabajo y a la renta. “Es fundamental buscar mecanismos que mejoren las condiciones laborales o entregar un estímulo por rendimiento efectivo de trabajo”, propone.
Respecto a la formación médica, si bien se mostró partidario de abrir más cupos, advirtió que sólo debe hacerse en escuelas de medicina que tengan una capacidad de formación adecuada. “Sería muy grave abrir cupos por abrir. Mejor es tener pocos médicos pero buenos, en vez de tener muchos médicos que no cuenten con una buena formación. De allí la importancia de que exista un buen sistema de acreditación”.
En el ámbito de la formación de médicos, un problema grave que expone el Dr. Armas es la situación actual de los campus clínicos, los cuales no alcanzan a acoger a todos los estudiantes que hoy cursan medicina. Situación que ha conllevado a una tremenda disputa entre las universidades privadas y públicas, por tomar posición en dichos campus.
“Esta situación es grave, porque ningún estudiante debiera quedarse sin campus clínico porque la medicina no se puede enseñar solamente con texto y pizarrón, también se necesita hacer la formación al lado de un tutor, un maestro y en un hospital que tenga enfermos, con tecnología e infraestructura apropiada”.
