«Las personas que huyeron son personas imputadas con antecedentes previos, uno de ellos tiene robo con intimidación», dijo el titular de Justicia sobre los internos que intentaron escapar de la cárcel de Talagante. Respecto al deceso de Rodrigo Donoso, quien no habría hecho caso a las advertencias, el secretario de Estado afirmó que los efectivos tienen «instrucciones precisas» para primero disparar al aire y después usar las armas contra quienes ingresan «a la zona de fuego».
Si bien hay un sumario en curso, el ministro de Justicia, Teodoro Ribera, justificó la decisión del personal de Gendarmería que el domingo último hizo uso de sus armas de fuego para frustrar el intento de fuga de cinco reclusos desde la cárcel de Talagante, operativo que terminó con uno de los presos abatido de un tiro en la cabeza.
El fallecido, identificado como Rodrigo Esteban Donoso Jiménez, habría recibido varias advertencias antes de ser herido de muerte, como gritos de advertencia y disparos al aire, los cuales desoyó.
Junto al subdirector de Gendarmería, Marcos Fuentes, Ribera indicó que «si los presos se hubiesen arrancado, yo le aseguro que hoy estaría instruyendo un sumario por qué sucedió».
Y agregó: «las personas que huyeron, son personas imputadas con antecedentes previos, uno de ellos tiene robo con intimidación. No estamos hablando de blancas palomas y el personal tiene instrucciones precisas de quien ingresa a la zona de fuego, luego de disparar al aire utilizar el armamento”, explicó.
