El timonel del gremialismo, Patricio Melero, intentó entregar sin éxito una carta en la delegación diplomática, en la cual se solicita al mandatario cubano entregar información sobre los ex frentistas involucrados en el asesinato de Jaime Guzmán. Sin embargo, la gestión fue infructífera, debiendo dejarla en el antejardín, ya que en la puerta del edificio cuelga un letrero que dice: «No se atenderá público».
Cerca de las 09:00 horas de esta mañana un grupo de militantes de la UDI, encabezados por la senadora Ena von Baer y los diputados Felipe Salaberry y Cristián Letelier, llegó hasta la embajada de Cuba con el objetivo de manifestar su rechazo a la visita que realizará el presidente Raúl Castro a Chile con motivo de la Cumbre Celac-Unión Europea. En el lugar lo esperaba medio centenar de integrantes del comité chileno de solidaridad con Cuba.
La protesta fue convocada por la secretaría ejecutiva de la UDI, quienes expresaron que “la idea es aguarle la fiesta a Castro”.
En la ocasión, el timonel de la UDI, Patricio Melero, intentó entregar sin éxito una carta en la delegación diplomática. En ella se solicita al mandatario cubano entregar información sobre los ex frentistas involucrados en el asesinato de Jaime Guzmán. Sin embargo, la gestión fue infructífera, debiendo dejarla en el antejardín, ya que en la puerta del edificio cuelga un letrero que dice: «No se atenderá público».
«Se negaron una vez más a aceptar las expresiones democráticas; una vez más el gobierno cubano no quiere aceptar que la democracia y los tribunales de Justicia puedan actuar», sostuvo el diputado.
«Ésta es la falta de diálogo del régimen cubano, que se niega una vez más a colaborar con los tribunales de Justicia. No reciben las cartas, no abren el diálogo y la impunidad sigue», agregó Melero.
Mientras esto ocurría, de la vereda del frente los adherentes a Castro reclamaban: “Es una vergüenza que un parlamentario chileno venga a hacer semejante show a la embajada de Cuba, nos parece un vergüenza y no representa la voluntad de los chilenos”, declaró Sandra Rojas a Radio Cooperativa.
En tanto, el director ejecutivo de la Fundación Jaime Guzmán, Jorge Jaraquemada, justificó las «acciones» que está emprendiendo la UDI.
«No había acto de protesta ni una funa, pero gente con banderas cubanas nos agredió con gritos. Es una farsa que una dictadura marxista de 54 años promueva la democracia. No ha habido verdad ni justicia para la familia y los amigos de Jaime Guzmán, hay absoluta impunidad. Hay una red de protección para mantener la impunidad después de tanto tiempo», indicó.
Además puntualizó que se han realizado numerosas diligencias ante el gobierno cubano y «no ha habido ningún eco (…) hay una orden de captura internacional y Cuba se negó a notificarla. Uno aprovecha las situaciones que tiene y aquí hay una situación inmejorable». Por ello, pidió que el gobierno cubano «por fin» colabore con la Justicia chilena.
