Publicidad
Original, similar o genérico: qué hay que saber antes de elegir un medicamento Salud

Original, similar o genérico: qué hay que saber antes de elegir un medicamento

El precio de los medicamentos genéricos puede llegar a ser hasta un 5% del precio del medicamento original o de marca. ¿Por qué son significativamente más baratos? ¿Son igualmente eficaces y seguros que el original? ¿En qué debemos fijarnos al momento de adquirir un medicamento? 


El acceso a medicamentos en Chile es una de las demandas sociales más recurrentes. De hecho, según la última Encuesta Nacional de Salud, realizada por el Instituto de Salud Pública de la Universidad Andrés Bello, los chilenos gastan en promedio cerca de $60 mil mensuales en medicamentos.

Con el objetivo de informar a las personas y transparentar el comportamiento del mercado durante la pandemia, un reciente estudio del Servicio Nacional del Consumidor (Sernac) reveló que actualmente existen diferencias de hasta 17 veces en el precio de los medicamentos al comparar los de marca con los genéricos, alcanzando en algunos productos hasta $45 mil de diferencia entre ellos.

Por eso, es importante dar a conocer cuáles son los tipos de fármacos disponibles y el origen de las diferencias en sus valores. El presidente del Regional Santiago del Colegio de Químicos Farmacéuticos y Bioquímicos de Chile A.G., Jorge Cienfuegos, quien además es académico de la Universidad Andrés Bello, ayuda a profundizar en este tema.

¿Qué tipos de medicamentos existen?

Medicamento innovador u original: “Es aquel que resulta de un proceso de investigación, que está normalmente protegido por una patente que dura aproximadamente 20 años y es fabricado de manera exclusiva por el laboratorio farmacéutico que lo desarrolló. Cuenta con el sustento de los estudios preclínicos y clínicos que permiten concluir que el fármaco es seguro y eficaz para la población. Se suele comercializar bajo una marca comercial. Una vez concluido el periodo de la patente farmacéutica, puede ingresar al mercado los medicamentos que son copias del original, o similares. Puede tener una marca comercial, o tener el nombre de la molécula (DCI”, expresa.

Medicamento similar con marca: “Corresponde a la copia del innovador y se caracteriza porque contienen el mismo principio activo que el original; sin embargo, tiene una marca comercial asociada”, señala el especialista.

Medicamento genérico: “También corresponde a la copia del innovador, por lo que igualmente contiene el mismo principio activo que el original; no obstante, se comercializa sin marca bajo la Denominación Común Internacional (por ejemplo: atorvastatina, paracetamol, ibuprofeno, etc.). 

¿Qué es la bioequivalencia?

El presidente del Regional Santiago del Colegio de Químicos Farmacéuticos y Bioquímicos de Chile A.G. indica que “un atributo de relevancia para identificar la calidad de los medicamentos genéricos y similares es la bioequivalencia, que es una certificación que entrega el Instituto de Salud Pública (ISP), la cual asegura que el medicamento cuenta con estudios para probar que posee la misma eficacia y seguridad que el producto original. En Chile, los bioequivalentes se reconocen por la franja amarilla en su estuche, ya que no todos los similares o genéricos son bioequivalentes”. 

¿Por qué los genéricos son los más baratos?

“La diferencia de precio tiene que ver con el ciclo de vida del producto: el medicamento original debe financiar las distintas fases de investigación y estudios clínicos y preclínicos, por eso cuenta con patente, lo que le permite recuperar esta inversión. Una vez vencida la patente, salen al mercado los similares y genéricos, generando así competencia en el mismo. Estos últimos son más baratos que el original porque solo necesitan demostrar que tienen el mismo efecto que el original y, por otro lado, no tienen una marca comercial que aumente el costo”, puntualiza Cienfuegos. 

¿Son igualmente eficaces los medicamentos genéricos que los innovadores?

El experto precisa que “para eso existe la bioequivalencia, que nos habla de la posibilidad de intercambiarlos por el medicamento original o intercambiabilidad. En la medida que el genérico es bioequivalente; es decir, que cuente con la franja amarilla y su planta de producción cuente con altos estándares de calidad en su proceso de fabricación, tales como como las Buenas Prácticas de Manufacturas o GMP (por sus siglas en inglés), será igualmente seguro y eficaz que el original”. 

¿Por qué existe la percepción de que los genéricos, al ser más baratos, son de menor calidad?

“Las personas tienden a asociar que lo más barato es de menor calidad. Esto incluso ocurre con los medicamentos que se entregan en el servicio público; sin embargo, existe el respaldo del Departamento Agencia Nacional de Medicamentos del Instituto de Salud Pública que, a través de la bioequivalencia, la farmacovigilancia y el aseguramiento de la calidad por medio de la fiscalización, busca asegurar la calidad de los medicamentos que hay en nuestro país y, si se encuentra una falla, corregirla lo antes posible”, afirma Cienfuegos. 

¿Cómo podemos identificar un medicamento genérico de calidad?

Jorge Cienfuegos indica que “algo fácil de identificar es la bioequivalencia porque eso se puede ver en la franja amarilla del estuche. Un medicamento genérico y bioequivalente es sinónimo de un medicamento de calidad a bajo costo».

«Ahora, si ocurriese algún problema con el medicamento, sea este original, similar o genérico, hay que comunicarlo de inmediato a nuestro equipo de salud o a nuestro farmacéutico de confianza, que está disponible en todas las farmacias del país de manera gratuita. Esto ya que, pese a los controles de calidad, es posible que tengamos dudas o problemas con nuestros medicamentos y es ahí donde la farmacovigilancia entra en juego: identificar los problemas, evaluar sus causas y tomar acciones correctivas requiere de todos y cada uno de nosotros”, agrega. 

Con respecto a la intercambiabilidad, afirma que “es un concepto más amplio que el de bioequivalencia, que incorpora criterios de calidad y a la farmacovigilancia. Es entender a la calidad más allá de un estudio particular, sino con la activa participación de la autoridad sanitaria, profesionales de salud y por supuesto de los pacientes».

«Si lo que queremos es cuidar nuestra salud y también nuestro bolsillo, la recomendación es preguntarle al médico tratante si existe alguna alternativa genérica bioequivalente para nuestro tratamiento o acercarse a los químicos farmacéuticos al momento de adquirir un medicamento y preguntarle qué otras opciones existen y de qué laboratorios, y escoger aquel que le dé más confianza acorde a su bolsillo”, finaliza.

Publicidad

Tendencias