Si bien la brecha de género en el ingreso alcanza su punto más bajo desde el año 2010, según la encuesta ESI publicada por el INE, el 50,2% de quienes tienen un ingreso igual o menor al promedio ($4000.000), son mujeres.
La brecha de género en ingresos que existe en el país sigue quedando en evidencia en la Encuesta Suplementaria de Ingresos (ESI) correspondiente al año 2018, publicada este martes por el Instituto Nacional de Estadísticas (INE)
Solo un dato: de las 8.063.152 personas ocupadas estimadas, un 55,8% correspondió a hombres, quienes percibieron un ingreso medio de $652.397. Las mujeres equivalieron a 44,2% del total de ocupados y obtuvieron un ingreso medio de $474.911. Además, el 50,2% de los encuestados que tienen un ingreso igual o menor al promedio ($4000.000), son mujeres.
De este modo, la brecha de género en el ingreso medio es 27,2% en desmedro de las mujeres, y si bien es la menor desde el año 2010 (cuando se ubicó en -32,8%) sigue evidenciando una profunda desigualdad salarial.
Respecto al 50% de la población que recibió salarios iguales o menos a los 400 mil pesos durante el año 2018, “las mujeres obtuvieron un ingreso mediano mensual de $343.234 y los hombres $411.100; es decir, la brecha de género del ingreso mediano se ubicó en -16,5% en desmedro de las mujeres, la menor desde el año 2010 (-23,9%)”.
Asimismo, el Instituto Nacional de Estadísticas añade que “las mujeres que trabajan en jornada de 44-45 horas semanales, perciben en promedio un ingreso 18% menor al de los hombres».
Respecto a la cantidad de salarios mínimos recibidos por un individuo durante el período de encuesta, un 51,2% de los hombres asalariados percibe 2 salarios mínimos netos o menos, mientras que esta proporción aumenta a un 58,2% en el caso de las mujeres asalariadas.
La Encuesta Suplementaria de Ingresos (ESI) recaba anualmente información de ingresos de las personas y hogares en el país. Esta mide el ingreso corriente de los individuos, es decir, los ingresos nominales provenientes principalmente del mercado de trabajo, las rentas de la propiedad y las transferencias corrientes que reciben las personas y hogares en período de residencia de la encuesta, por ende, solo el ingreso neto es registrado en la encuesta.