La iniciativa es presentada hoy por su viuda, Joan Jara, y se promocionará en radios y metro en las próximas semanas. La recolección de testimonios y material del creador asesinado hace 32 años se hará principalmente en agosto y septiembre dentro del país y hasta fin de año en el extranjero.
Recuperar a Víctor de a pedacitos. Rearmar al cantante en su vida y en su muerte, articular lo que fue y lo que es, lo que hizo él y lo que los demás hicieron de su figura. Ésa es la gran idea que anima la campaña que inicia la Fundación Víctor Jara a partir de hoy.
Se trata de una iniciativa inédita, prácticamente una cruzada: recolectar todos los testimonios que existan del compositor asesinado en 1973 -en el entonces Estadio Chile, que hoy lleva su nombre. La idea es que las personas que posean algún material fotográfico, literario, fílmico o de cualquier tipo del artista contribuyan a acrecentar el registro existente sobre uno de los creadores más emblemáticos de la década de los ’70.
Gloria Konig, coordinadora del proyecto "Chile recupera la memoria de Víctor Jara" explica que la campaña se comenzó a gestar hace aproximadamente cuatro meses. En abril de este año comenzó el trabajo de digitalizar el enorme archivo de la fundación que lleva su nombre. La tarea no era simple, porque el material está dividido en dos grandes áreas: su vida y lo que han denominado el registro "post 73". "La primera incluye sus fotografías, los manuscritos de sus canciones, la correspondencia personal con artistas e intelectuales de la época, registros de prensa de sus actividades en Chile y el exterior hasta el momento de su muerte", relata. La segunda, en cambio, comprende "todo aquello que la gente empezó a construir en torno a Víctor a propósito de su obra y de su terrible muerte. Hay afiches del mundo, de actos de solidaridad con Chile, regalos que ha hecho la gente, poemas, dibujos, imágenes, registro de actividades, calles y escuelas con su nombre, distintas cosas que la gente ha ido enviando durante estos 32 años para recordarlo y homenajearlo."
Se trata, entonces, de un archivo del hombre y de uno del recuerdo. La idea de digitalizar todo este material es, esencialmente, facilitar el acceso a la figura del dramaturgo y actor a todo el mundo.
En este proceso, sin embargo, Joan Jara y la gente de la fundación se dieron cuenta de que era necesario completar esa obra con aportes desconocidos que probablemente pertenecieran a miles de personas distintas. Son, precisamente, esos fragmentos de Víctor, diseminados en el planeta, lo que la campaña pretende reunir con la ayuda de la Dirección de Asuntos Culturales y la de Chilenos en el Exterior de la Cancillería.
Sumando recuerdos para una memoria común
La recolección de material comienza oficialmente hoy, con una ceremonia encabezada por la viuda del músico y una exposición que muestra parte de su archivo. Sin embargo, la simple mención de la iniciativa ha generado ya una oleada de colaboraciones espontáneas.
"Estamos casi asustados -bromea Konig-, porque ha pasado una cosa insólita: cada vez que vamos a algún lugar con Joan, alguien tiene algo. Es increíble".
Y quienes se encuentren entre la solidaridad altruista y el pequeño egoísmo sentimental; es decir, quienes tengan algo de Víctor Jara, pero no quieran donarlo por tratarse de un objeto o registro especialmente significativo, tienen una salida: facilitar el material para su duplicación.
No se trata de desprenderse de los recuerdos, sino de sumarlos y compartirlos. Todas las personas que colaboren de algún modo, recibirán una acreditación simbólica. "Los que puedan donar o prestar el material van a tener un certificado de la fundación, firmado por Joan, foliado, que dice ‘yo soy parte de la construcción de la memoria de Víctor’", asegura la encargada del proyecto.
La difusión de la campaña incluye un homenaje en las pantallas del metro durante las próximas semanas y fuerte promoción en radios. En principio, la recolección debería comprender los meses de agosto y septiembre en Chile y hasta fin de año en el exterior. En este caso, serán las embajadas y consulados del país en el exterior las entidades encargadas de la recopilación y envío de las contribuciones.
