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En el Informe de Política Monetaria de junio, el instituto emisor proyectó una caída del PIB de hasta 7,5%, lo que representa la peor contracción en 35 años. El informe se conoce luego que en la víspera, en su reunión mensual de política monetaria, el consejo del instituto emisor decidiera mantener la tasa de interés en mínimos históricos y activar nuevas medidas de estímulo por un total de US$24 mil millones [ACTUALIZADA]
Confirmando el sombrío panorama para la economía chilena golpeada por la crisis del coronavirus, el Banco Central empeoró sus proyecciones al estimar una caída del crecimiento en 2020 entre -5,5% y 7,5%, lo que representa la contracción más dura en 35 años.
El dato, contemplado en el Informe de Política Monetaria de junio, representa un retroceso respecto a las estimaciones previas, dado que en su informe de abril, el emisor había previsto una caída de entre 1,5-2,5% en la actividad para este año.
En especial, el panorama es aún más grave es los meses que vienen, en línea con la histórica caída del -14,1% del Imacec de abril. Y si bien el reporte indica que “la economía comenzará a recuperarse en la segunda parte del 2020, no alcanzará aún niveles de actividad comparables a los de principios de año».
El informe fue un nuevo balde de agua fría para el Gobierno. «Nos quedamos muy cortos con las proyecciones. El segundo trimestre será para el olvido», asumió el ministro de Hacienda Ignacio Briones entrevistado en Radio ADN.
Según el jefe de la billetera fiscal, las cifras comprueban que atravesamos un periodo “severamente complejo en donde vamos a tener una contracción económica significativa”.
Además, asumió que tanto el Banco Central, como nosotros nos habíamos quedado cortos con las proyecciones que habíamos hecho hace meses atrás”.
Otros datos preocupantes del IPOM del Banco Central son que la inversión se desplomaría -15,9% este año y la demanda interna caería 10,4% (5,8% previo).
Lo positivo: la inflación subiría sólo 2% en 2020 y para 2021 el Banco Central proyecta una recuperación mayor a la prevista, con un crecimiento entre 4,75 y 6,25%.
El informe se conoce luego que en la víspera, en su reunión mensual de política monetaria, el consejo del instituto emisor decidiera mantener la tasa de interés en mínimos históricos. Pero además, asumiendo que estamos en un escenario donde asume que “los efectos de la pandemia de Covid-19 se han seguido prolongando e intensificando”, la instancia decidió activar nuevas medidas de estímulo por un total de US$24 mil millones.
Entre las medidas se considera una compra de activos por US$ 8 mil millones y una segunda etapa de una línea financiera para bancos por un monto de US$ 16.000 millones destinado -entre otros- a la “entrega de crédito bancario a pequeñas y medianas empresas”.
