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A defender la TV pública del intervencionismo privatizador Opinión

A defender la TV pública del intervencionismo privatizador

Antonio Leal
Por : Antonio Leal Ex Presidente de la Cámara de Diputados, Director de Sociología y del Magister en Ciencia Política, U. Mayor. Miembro del directorio de TVN.
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Me adhiero plenamente a la declaración del Sindicato de Prensa del canal que señala que esta interferencia, las filtraciones, y las operaciones políticas en curso constituyen una agresión a TVN y ponen en grave riesgo ya no solo la autonomía del canal sino su propia existencia. Todo esto mientras TVN recupera audiencia y avisaje y mientras algunos miembros del Directorio sea de la mayoría como de la minoría hemos dialogado para estabilizar el canal y seguir trabajando para fortalecer a TVN que es el único medio público en nuestro país.


Lo que se hace es intervenir a TVN, vulnerando su autonomía y colocando en riesgo la existencia misma de la TV pública en Chile. Aquí hay un diseño claro: se ha pretendido sacar al director ejecutivo Jaime de Aguirre, por medios ilegales, a través de filtraciones de actas, documentos y contratos, lo cual es declarado ilícito, y está penalizado hasta con cárcel, por el artículo 9 de la propia ley de TVN. Todo el mundo y los medios saben quién ha perpetrado este hecho, ya que al no obtener los votos requeridos en la ley para ello, ha urdido esta maniobra con el fin de obligar al director ejecutivo a renunciar. De esta forma nuevamente, como ha ocurrido en años anteriores, se vulnera el gobierno corporativo que es nombrado por dos poderes del Estado, y se presiona para lograr el control político del canal colocando en riesgo su deber de actuar resguardando el pluralismo, con lo cual se busca transformarlo en un canal de Gobierno o, peor aún, de un partido.

A ello se suman numerosos artículos en los medios y una campaña en redes, especialmente de personeros de la derecha que pertenecieron a la dictadura, abogando por el fin de TVN o la privatización de ella.

[cita tipo=»destaque»]Advierto que las sucias maniobras que se ha emprendido desde dentro y fuera del Directorio pueden lograr el sueño eterno de un sector de la derecha chilena: que TVN sea vendido, que deje de existir, que desaparezca toda presencia pública, democrática y plural de los medios de comunicación. Mi llamado es a defender la TV pública y a derrotar a quienes arrinconan a esta empresa autónoma del Estado.[/cita]

Me adhiero plenamente a la declaración del Sindicato de Prensa del canal que señala que esta interferencia, las filtraciones, y las operaciones políticas en curso constituyen una agresión a TVN y ponen en grave riesgo, ya no solo la autonomía del canal, sino su propia existencia. Todo esto mientras TVN recupera audiencia y avisaje y mientras algunos miembros del Directorio, sean de la mayoría como de la minoría, hemos dialogado para estabilizar el canal y seguir trabajando para fortalecer a TVN, que es el único medio público en nuestro país.

En TVN no hay problemas de probidad y ha habido siempre, al menos en democracia, con diversos Directorios y ejecutivos, un exhaustivo resguardo del patrimonio de la empresa hasta en sus más mínimos detalles.

Advierto que las sucias maniobras que se ha emprendido desde dentro y fuera del Directorio pueden lograr el sueño eterno de un sector de la derecha chilena: que TVN sea vendido, que deje de existir, que desaparezca toda presencia pública, democrática y plural de los medios de comunicación. Mi llamado es a defender la TV pública y a derrotar a quienes arrinconan a esta empresa autónoma del Estado.

  • El contenido vertido en esta columna de opinión es de exclusiva responsabilidad de su autor, y no refleja necesariamente la línea editorial ni postura de El Mostrador.
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