El Secretario Ejecutivo del Consejo Superior de Educación Fernando de la Jara presentó su renuncia luego de un año y medio en el cargo. Su gestión estuvo marcada por cuestionamientos que lo vinculaban con la nula independencia en su relación con las universidades que gestionan su autonomía.
Nerviosismo se palpa en el Consejo Superior de Educación tras la renuncia de Fernando de la Jara a la secretaría ejecutiva de la entidad. La salida, que según fuentes de educación se preparaba hace semanas, se enmarca dentro de cuestionamientos que lo vinculan con la supuesta recepción de pagos por parte de la Universidad Iberoamericana por la obtención de su autonomía.
Las acusaciones hacia De la Jara, hechas a través de un correo electrónico que llegó al Consejo Superior, motivaron que el organismo interpusiera una querella contra quienes resulten responsables. Así lo confirmó el rector de la casa de estudios Juan José Villavicencio, quien aseguró que el proceso «sigue en curso y la justicia determinará el origen de esa información, pues nuestra relación con el secretario ejecutivo siempre fue la correcta».
La situación ha generado gran conmoción en esa universidad pues fue citado a declarar el vicerrector académico Juan Tosso.
De la Jara se apresta a ocupar un cargo directivo en la Universidad Santo Tomás desde la próxima semana, en momentos en que la casa de estudios estrena su autonomía. Entre los años 1993 y 2001 se desempeñó como vicerrector académico y decano de facultad de humanidades de la Universidad Andrés Bello.
El cargo será asumido por José Miguel Salazar Zegers, hijo del destacado abogado de Derechos Humanos, Héctor Salazar.
El directivo es abogado se ha desempeñado como abogado de la Universidad Diego Portales y asumirá en mayo su puesto. Salazar se desempeñaba en la Comisión Nacional de Acreditación de Pregrado, órgano encargado del sistema nacional de aseguramiento de la calidad de la educación superior. Además, Salazar fue Jefe del Departamento Jurídico del Consejo y asesor del Secretario Ejecutivo de este organismo.
Al tratar de conseguir una versión sobre la salida del profesional, la encargada de la unidad de comunicaciones Violeta González aseguró que no podía entregar informaciones sobre el tema hasta publicarla en su pagina web.
El Consejo Superior tiene la importante tarea de evaluar, aprobar o rechazar los proyectos institucionales y los programas conducentes a título o grado que presenten las instituciones privadas que aspiren a un reconocimiento oficial. Además, tiene la facultad para evaluar el desarrollo de los proyectos.
Otra de las misiones de la institución se relaciona con el establecimiento de sistemas de examinación de los alumnos de las instituciones privadas sometidas a acreditación, con el fin de evaluar el cumplimiento de los programas de estudio y el rendimiento de los alumnos.
