Documento fue leído en el último Pleno de la Suprema y corresponde a informe sobre visita que hizo el ministro Milton Juica al tribunal de alzada capitalino, revelando notorias deficiencias. Atrasos, escasez de recursos y necesidad de crear nuevas cortes son algunos de los tópicos que aborda el texto.
Como "terrorífico" definió un ministro de la Corte Suprema el reciente informe sobre el estado de la Corte de Apelaciones de Santiago presentado por su colega Milton Juica al pleno del máximo tribunal el pasado viernes, dijeron a El Mostrador.cl fuentes judiciales.
Antecedentes recogidos por este diario indican que uno de los puntos que si bien no sorprendió a los ministros sí causó gran preocupación es el nivel de atraso de las causas. De hecho, durante el Pleno se comentó por ejemplo, que existen algunas causas civiles que se tramitan desde 1993, es decir, hace 11 años.
Otro de los puntos, comentó un magistrado, tiene que ver con la recarga de trabajo del tribunal de alzada capitalino y la llegada que pronto hará la Reforma Procesal Penal a la Región Metropolitana.
Este medio intentó obtener una copia del informe con el ministro Juica, pero éste último declinó entregarlo, así como comentar detalles de su visita.
Ya hace dos semanas Juica sostuvo una reunión con los ministros del tribunal de alzada, donde se analizaron los nuevos desafíos de gestión, los problemas de trabajo, la llegada de la reforma y por cierto la escasa cantidad de ministros en visita y fuero que existen para múltiples causas, entre ellas las de derechos humanos.
En términos estadísticos si bien es cierto que los ingresos de causas bajaron un 28 por ciento el 2003 a nivel país en relación con el año anterior, lo concreto es que las Cortes de Apelaciones de Santiago y San Miguel presentan los más altos niveles de trabajo acumulado.
Por ejemplo, en Santiago el primero de los dos tribunales de alzada registró 58 mil 664 causas ingresadas y el restante, 24 mil 732 causas. Estas cifras implican, de acuerdo a los números del último discurso del año judicial, una proporción del total nacional de 33 y 14 por ciento, respectivamente.
En otras palabras, el informe que presentó Juica demuestra, a juicio de otros ministros que fueron consultados, que la creación de dos nuevas salas -es decir, con seis nuevos ministros-, aún no implicarían un cambio profundo en el sistema de trabajo, aunque sin duda aliviarían la presión que enfrentan las salas actuales.
De allí que durante el Pleno se comentó la urgente necesidad de crear nuevas cortes en Santiago, para lo cual se emitirían oficios relatando esta situación tanto al Ministerio de Justicia, como también a Hacienda, como una forma de lograr conseguir recursos y hacer que las autoridades estén conscientes de la situación.
En todo caso, aún no hay un acuerdo formal tomado a este respecto, dijo otro supremo, lo que implicaría que en los próximos plenos esta situación debiera volver a tratarse.
De todas formas, las ansias de que existan nuevas cortes de apelaciones en Santiago ha sido el deseo manifestado en, al menos, los últimos diez discursos de inicio del año judicial que se lee cada primer día de marzo.
