El Mandatario dijo que su Gobierno está dispuesto a sentarse a conversar con los sindicatos y comprometido a escuchar las demandas, inquietudes y requerimientos de los asalariados.
Tras asistir a la misa de San José Obrero en la Catedral Metropolitana, con motivo de la conmemoración del «Día del Trabajador», el Presidente Sebastián Piñera aseveró que en su gobierno están «las puertas abiertas» y la «voluntad comprometida» para escuchas los requerimientos de los trabajadores chilenos y reiteró que el dialogo es el «mejor camino» para optimizar la legislación laboral.
«Este Presidente, la ministra del Trabajo y nuestro Gobierno van a tener las puertas abiertas de par en par, los oídos muy atentos y la voluntad muy comprometida para escuchar las demandas, las inquietudes y los requerimientos de los trabajadores chilenos. El dialogo es el camino para poder mejorar nuestra legislación laboral y para poder mejorar la vida y la calidad de vida de todos nuestros trabajadores», enfatizó el mandatario a la salida del templo católico.
En cuanto a la marcha convocada por la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), cuyo acto central se realizará en calles Alameda con Brasil, Piñera afirmó que en su día, los trabajadores tienen todo el derecho a manifestarse, celebrar y festejar, pero que esperaba que la actividad se desarrolle manera pacífica y tranquila, sin violencias y destrucciones.
«Los felicito por la marcha que están celebrando y por supuesto todos queremos que sea una marcha del Día del Trabajo y que por lo tanto se desarrollo de forma pacifica, tranquila, sin violencia sin destrucción y eso estoy seguro que es la intención de los que han convocado a esta marcha», aseguró el jefe de Estado.
En la oportunidad, el mandatario destacó la labor realizada por sus ministros en los primeros meses de gobierno y aprovechó de bromear con las horas de trabajo de los integrantes del gabinete.
«Se están organizando en un sindicato para cobrar horas extraordinarias porque dicen que han trabajado demasiado. Yo les digo que cuando asumieron los ministerios sabían muy bien que era un compromiso que significaba mucho trabajo, mucho esfuerzo, pero también mucha satisfacción», bromeó Piñera.