El senador Hernán Larraín (UDI) formuló un llamado al Presidente Sebastián Piñera a que escuche la voz de las iglesias y que proponga un indulto que pueda favorecer a personas por razones humanitarias y que hayan cometido actos graves.
«Yo voté a favor del indulto a los terroristas y pido a todos quienes hicieron lo mismo, a ser consecuentes y que hagan lo mismo esta vez y a aquellos que no lo hicieron les pido que abran su corazón al llamado que nos hace la Iglesia», sostuvo el legislador del gremialismo.
Aseguró que los acreedores de este «beneficio» deben demostrar públicamente arrepentimiento por los actos cometidos y presentar las disculpas pertinentes a todas las familias afectadas, «porque sólo de esta manera la persona hace notar que está acreditada para recibir el perdón», y que además no se debe distinguir entre civiles ni militares, sino que se deben atender los casos individualmente y que cada uno, de ser aprobado, resguarde la seguridad ciudadana.
Larraín expresó además que un beneficio de este tipo es posible cuando una persona ha sido juzgada, sancionada y ya ha cumplido parte de la pena y, por lo tanto, lo que se procura es que por alguna razón especial como puede ser una enfermedad, se pueda revisar la determinación tomada por la justicia. «Un indulto no puede ser un acto de discriminación, porque lo hicieron civiles o militares. El indulto debe ser un acto generoso basado en hechos objetivos que atienda a las situaciones humanitarias y personales que rodean el caso».
Recordó que a lo largo de la historia se han hecho indultos generales, explicando que hay una ley que otorga al Presidente de la República la facultad para otorgar indultos particulares y luego la Constitución señala que por una ley se puede hacer un indulto general y, ahora, estamos hablando de un indulto general y hemos dictado muchas leyes sobre esta materia, el más reciente el que se hizo en el año 2004 que benefició a un grupo de personas que habían cometidos actos terroristas en democracia y que fueron objeto de beneficios cuando hubiesen cumplido 10 años de presidio efectivo. «Quiero decir que ese indulto a esas conductas terroristas fue aprobada por la toda la Concertación en el Senado votaron a favor: Eduardo Frei, Jorge Pizarro, Hosaín Sabag, Mariano Ruiz Esquide y Andrés Zaldívar, por lo tanto a ellos corresponde también decirles que así como miramos con espíritu de reconciliación a quienes habían cometido esos actos, hoy podamos revisar los que hayan cometido otros delincuentes, cuando concurran requisitos que nos parezcan razonables y prudentes».
Consultado respecto de los delitos de lesa humanidad el senador dijo que «si un civil comete una violación y asesinato de un menor, no me parece que merezca un indulto. Si un militar que tenía en ese minuto 18 ó 20 años, cometió una ejecución ordenada por un superior. Creo yo que debería revisarse su condición si hay razones humanitarias que así lo justifiquen».
Respecto de la postura del partido, el senador dijo que «cuando se votó el indulto a los terroristas, la UDI votó en contra y yo fui el único que votó a favor. Por lo tanto, en esta materia hay que respetar las decisiones cuando se tratan de cuestiones de conciencia. Pienso que esto es un esfuerzo que nos cuesta, pero que al mismo tiempo nos habla de que esto hace grande a los países, sobre todo en el Bicentenario. No me parece que porque se otorga un indulto se debilita la política contra la delincuencia, porque esa batalla la debemos dar todos con fuerza», finalizó.
QUIEBRE DE RELACIONES VENEZUELA-COLOMBIA
Respecto del rompimiento de relaciones que hizo Venezuela con Colombia, Larraín dijo que la actitud del presidente Hugo Chávez «nos debe llamar a la preocupación, porque más allá de intervenir en asuntos que son propios de él y Colombia, nosotros vemos que esas actuaciones del presidente Chávez ponen en peligro la paz de la región y obligan a que organismos como la OEA o Unasur deban actuar con efectividad y prontitud. Nosotros vemos demasiada pasividad en estos organismos internacionales y espero que Chile, más que intervenir directamente, busque a través de estos organismos mediar para que podamos tener rápido soluciones a conflictos de esta naturaleza que a juzgar por palabras del Presidente Chávez no sabemos hasta dónde puedan escalar».
En cuanto a la visita del presidente electo de Colombia y de una posible interpretación por parte de la comunidad internacional como un apoyo a la postura de ese país, el senador UDI dijo que «Chile mantiene relaciones con Colombia muy positivas y la visita del futuro presidente colombiano ayuda a potenciar esas vinculaciones que no son sólo convenientes sino que necesarias en un proceso de integración. Nosotros debemos cooperar con todos los países que quieren la paz en la región. Así se lo pedimos al presidente de Venezuela, porque nuestras relaciones con su país también son convenientes y necesarias».
