Publicidad
Ernesto Silva toma el bastón de Jovino en la UDI Asume liderazgo de la derecha dura de cara a las redefiniciones en el sector:

Ernesto Silva toma el bastón de Jovino en la UDI

Claudia Rivas Arenas
Por : Claudia Rivas Arenas Periodista de El Mostrador @crivasa
Ver Más

Aunque lleva pocos años participando activamente en política, el diputado por el distrito 23 de Las Condes ha logrado avanzar rápidamente bajo el alero de Jovino Novoa. Pero si hasta hace un tiempo se veía al novato legislador como el delfín del senador, ahora se advierte que ambos “trabajan en equipo” y el primero ha logrado ganarse la confianza de un importante, y ahora más influyente, sector de la colectividad.


Desde que el UDI Ernesto Silva llegó al Congreso en el cupo del actual subsecretario de Hacienda, Julio Dittborn, destacó entre sus pares. El legislador novato se adecuó rápidamente al ambiente político, pese a venir del mundo académico, y congenió con uno de los coroneles más influyentes del partido, el senador Jovino Novoa. Durante estos casi cuatro años ha quedado de manifiesto, en la colectividad, la cercanía intelectual entre ambos y la alta coincidencia en materia de doctrina económica y defensa del modelo. De ahí que la figura del diputado comenzara a tomar un rol preponderante en el círculo del representante de Santiago Poniente en la Cámara Alta, al punto que, desde hace algún tiempo, se le reconoce como su delfín al interior de la tienda. Y no son pocos los que creen que podría ser la carta de Novoa para encabezar al gremialismo en el próximo período, algo de lo que ya se habla en bambalinas y que cobrará realce pasadas las presidenciales. En este contexto es que un sector interpreta las últimas apariciones del parlamentario por el distrito de Las Condes, él único en que dobla la derecha, como una señal de que “ya está listo para asumir un rol más político dentro de la UDI”, apuntando hacia la presidencia de la tienda, considerando que nadie cree que Patricio Melero intente ir por la reelección “de ninguna manera”.

Un ex dirigente de la tienda de calle Suecia que desde el gobierno ha seguido la trayectoria del diputado tiene la convicción de que “es un tipo con una muy buena formación académica y es un valiente, de ideas y opiniones claras. No es medias tintas. En el partido hay diputados que piensan cosas que les parecen impopulares y por eso no las dicen, él no tiene ese problema. En eso se parece a Novoa, son tipos que no están pensando en las encuestas ni el voto al momento de manifestar sus opiniones”.  Y agrega que tanto el senador como el diputado “siempre están en posiciones difíciles de vender, que no son marqueteras, pero las dicen igual”. Sin embargo, admite que el delfín “la ha tenido más fácil que Novoa, porque está en un distrito, Las Condes, que es fácil para la derecha, no así Santiago Poniente, donde a Jovino siempre se le ha hecho más difícil, ha salido pero con esfuerzo,  para él hubo un costo mayor por las posiciones que asume”.

[cita]Los movimientos internos en la casona de calle Suecia están supeditados a lo que ocurra concluido el proceso eleccionario y a su resultado. Lo que sí parece emerger con claridad es que el diputado bautizado peyorativamente por sus detractores como el “custodio de la doctrina económica de la UDI”, por sus actuaciones en este ámbito, podría llegar a encabezar el partido más temprano que tarde. Y todo a partir también del hecho de que Melero no tiene espacio para imaginar un segundo periodo a la cabeza del partido, porque en la tienda se ha socializado la idea de que será él quien “pague los costos políticos por los malos resultados electorales”. [/cita]

Y pensando que el próximo año debiera haber elecciones internas en la UDI y que “efectivamente es muy probable que (Patricio) Melero no tenga respaldo para ir a la reelección”, este ex dirigente sostiene que es “absoluta y perfectamente posible” que emerja la figura de Silva como “un muy buen candidato” para encabezar la tienda. Y se adelanta a quienes en el partido estiman que aún no está preparado para tan alta responsabilidad, que no es necesario tener experiencia para llegar a presidir un partido, porque muchas veces “la gente se hace en ejercicio del cargo”. Por otra parte, manifiesta su certeza de que el diputado ya dejó de ser sólo el delfín de Novoa y cree que “dada su preparación y convicciones firmes”, ya se independizó y ha comenzado a escribir su propia historia política, aunque siempre en la misma línea de Novoa.

Estos años parecen haber sido un período de preparación para el hijo de uno de los fundadores de la Universidad del Desarrollo, Ernesto Silva Bafalluy, casa de estudios donde el actual diputado también ejerció la docencia. Y aunque en el partido hay quienes estiman que “todavía le falta mucho para aspirar a la presidencia”, lo cierto es que desde hace tiempo, en la UDI, se viene hablando de la necesidad de renovar los cuadros y, particularmente, la dirigencia a cuya presidencia ya han llegado tres de los cuatro coroneles –Pablo Longueira, Jovino Novoa y Juan Antonio Coloma–. De hecho, ese fue el principal argumento esgrimido por el actual secretario general del gremialismo, José Antonio Kast, en su fallido intento por encabezarla en lo que fue la primera contienda interna en la historia de la UDI.

Savia nueva

Ahora pareciera que es el momento de Silva. A sus 38 años representa la savia nueva de la tienda y ha demostrado un liderazgo de bajo perfil que ha ido creciendo especialmente este último año. Desde la Comisión de Hacienda y luego incorporado al equipo de la abanderada oficialista, Evelyn Matthei, ha defendido las posturas de la doctrina económica y política, que le ha dado la base electoral al partido, con tanta convicción que su vez ha comenzado a tener peso por derecho propio. Si bien tiene detractores al interior de la UDI, particularmente entre quienes lo ven como “el verdadero sucesor de Novoa”, porque estiman que la línea del senador “va a terminar perjudicando” el permanente crecimiento que la tienda había mostrado desde el año 2000, sus adherentes discrepan con esa mirada y ponen de relieve su “capacidad intelectual y serenidad con que defiende sus ideas que, finalmente, representan a un importante sector del partido. Porque no le da vergüenza ser lo que es, ahora que en nuestro sector algunos se quieren disfrazar con ropajes ajenos”, dice un consejero de la colectividad con verdadera admiración.

Prueba de ello son las palabras con que Silva rechaza la conformación de la “nueva derecha” que un sector de Renovación Nacional pretende sacar adelante, tras la figura del Presidente Sebastián Piñera y su titular de Defensa, Rodrigo Hinzpeter. En una entrevista concedida a La Tercera, el diputado señaló que “yo no me siento parte de una derecha acomplejada, me siento parte de una derecha con identidad, con historia, con ideas y con futuro. Creo que muchas de las ideas de la nueva derecha son el fruto de complejos y de falta de convicción”, lo que un parlamentario que se siente identificado con ese ideario interpretó como “una defensa de la derecha tradicional que representa la UDI y un sector de nuestro partido (RN). Esas son palabras de Novoa, que dijo algo muy parecido en una entrevista hace un tiempo”. Lo que entre los adherentes del diputado, en la UDI, es percibido como un atributo positivo, pues atribuyen sus palabras a la “sintonía fina” que ha logrado con el más experimentado coronel gremialista.

Pero tal como lo ve un observador de la UDI, con muchos años en el partido, Ernesto Silva “ya está listo para más responsabilidades y no como el delfín de Novoa, porque aunque comparten una misma mirada del partido que quieren para el futuro, Silva ya no es un novato, ha tomado vuelo propio, superando incluso a otros de sus pares que llevan muchos años en esto. Con Novoa conforman un equipo muy bien afiatado y no sería raro que así tomaran las riendas”. Pero los movimientos internos en la casona de calle Suecia están supeditados a lo que ocurra concluido el proceso eleccionario y a su resultado. Lo que sí parece emerger con claridad es que el diputado bautizado peyorativamente por sus detractores como el “custodio de la doctrina económica de la UDI”, por sus actuaciones en este ámbito, podría llegar a encabezar el partido más temprano que tarde. Y todo a partir también del hecho de que Melero no tiene espacio para imaginar un segundo periodo a la cabeza del partido, porque en la tienda se ha socializado la idea de que será él quien “pague los costos políticos por los malos resultados electorales”.

Publicidad

Tendencias