Viajes
Experta resalta que el turismo sustentable en Chile fomenta la colaboración con diversos grupos de interés, como mypymes, la comunidad local y organizaciones de la sociedad civil, proporcionando oportunidades para la innovación y el desarrollo conjunto.
Con la llegada del verano, Chile se erige como un destino que invita, no solo a explorar la belleza natural, sino también a sumergirse en una experiencia única y consciente a través del turismo sustentable.
La directora de la Escuela de Turismo y Hotelería de la Facultad de Economía y Negocios (FEN) de la Universidad Andrés Bello (UNAB), Mary-Ann Cooper, sostiene que esta tendencia emerge como un faro guía, marcando un cambio significativo en la forma en que disfrutamos de nuestras vacaciones.
La Organización Mundial del Turismo define el turismo sustentable como aquel que considera las repercusiones actuales y futuras, económicas, sociales y ambientales para satisfacer las necesidades de los visitantes, la industria, el entorno y las comunidades anfitrionas. Para Cooper, este enfoque no es solo deseable, sino crucial en la actualidad, sirviendo como pilar fundamental para el desarrollo turístico responsable.
La experta destaca que el turismo sustentable va más allá de mitigar los impactos negativos en el medio ambiente. En el ámbito de la industria, este enfoque genera valor a nivel de destinos, atrayendo a viajeros conscientes, especialmente entre las nuevas generaciones. Asimismo, fomenta la colaboración con diversos grupos de interés, como mypymes, la comunidad local y organizaciones de la sociedad civil, proporcionando oportunidades para la innovación y el desarrollo conjunto.
A nivel de las comunidades locales, impulsa el desarrollo económico acorde al territorio, valorizando la autenticidad e identidad local. Este no solo contribuye al sentido de pertenencia y orgullo de la comunidad anfitriona, sino que también atrae inversiones para mejorar la infraestructura territorial.
“El turismo sustentable es la columna vertebral del desarrollo turístico responsable. Cada paso que damos como industria y como viajeros debe considerar su impacto económico, social y ambiental”, subrayó Cooper.
La experiencia para los turistas se enriquece al viajar de manera sustentable, ya que proporciona significado y propósito al viaje. El aprendizaje sobre los destinos y la conexión con su gente y entorno generan un lazo afectivo entre el visitante y el lugar. Según Cooper, estas experiencias memorables pueden conducir a cambios positivos en el comportamiento del turista en su vida cotidiana.
Cooper también aborda el impacto ambiental de la presencia humana inconsciente en la globalidad de los viajes. Destaca la evidencia de riesgos climáticos extremos durante las temporadas altas, como olas de calor, ciclones e inundaciones. La crisis climática actual exige no solo considerar el impacto, sino también estar consciente de los riesgos asociados.
“Cada visita cuenta. La falta de conciencia puede dejar huellas duraderas en nuestros destinos. Debemos recordar que somos guardianes de estos lugares, y nuestro comportamiento determina su preservación”, advierte Cooper.
En cuanto a las iniciativas en Chile para concientizar a los turistas sobre la importancia del turismo sustentable, Cooper destaca la variabilidad según la procedencia del turista. Mientras que los turistas europeos suelen tener un conocimiento profundo de la sustentabilidad, los turistas latinos, incluidos los chilenos, requieren una mayor concientización. La información proviene principalmente de fuentes autónomas como noticias, documentales y revistas.
“Es esencial que todos, tanto visitantes como locales, comprendamos la importancia de proteger nuestros recursos y preservar la autenticidad de cada destino. Solo así podemos garantizar experiencias turísticas significativas y sostenibles a largo plazo”, enfatizó la experta.
En ese sentido, Cooper elogia la diversidad natural de Chile como un destino bendecido, con naturaleza variada y pristina, territorios remotos y pueblos recónditos. Destaca la red de parques nacionales bien cuidados y la presencia de hoteles y operadores comprometidos con la sustentabilidad, turismo cultural y ecoturismo. Además, subraya la importancia de reflexionar sobre el turista adecuado y el tipo de viaje que minimiza los impactos negativos, contribuyendo así al destino.
“No se trata solo de dónde ir, sino de cómo ir. La elección de cada viajero contribuye al impacto global. Optar por un turismo responsable y sustentable es la clave para preservar la riqueza natural y cultural de nuestro hermoso Chile”, concluyó la directora.
