PAÍS
Durante el último tedeum evangélico de la entonces presidenta Michelle Bachelet, algunos pastores y obispos de la ceremonia lanzaron duros dardos a la administración de aquel momento, algo que el círculo de Bachelet no tenía conocimiento de que iba a ocurrir. Casi un año después, varios de los que fueron protagonistas de esos dichos figuran trabajando a honorarios en el gobierno de Sebastián Piñera.
El próximo 16 de septiembre se realizará el tradicional tedeum evangélico. Se espera que para la ocasión, el presidente Sebastián Piñera esté presente en la catedral evangélica.
Pero no es el único que estará presente. También lo hará el anfitrión del evento: el obispo Eduardo Durán Castro. Durán fue protagonista del pasado tedeum, cuando Michelle Bachelet aún era presidenta. En dicha ocasión, él junto a otros religiosos cuestionaron la administración de la entonces mandataria.
La presencia de Durán incomodaba a Piñera, pues es investigado por la Fiscalía de Alta Complejidad de la Zona Oriente, quienes abrieron una investigación para determinar eventuales delitos de lavado de dinero o infracciones tributarias. Esto, por su alto patrimonio, cercano a los $1.152 millones.
Durán no es el único que se reencontrará con Piñera, ya que otros miembros que también estuvieron en el polémico tedeum del año pasado, lo volverán a ver. Como el pastor Patricio Moya, secretario ejecutivo del Concilio Nacional de Iglesias Evangélicas, y quien fue uno de los que lanzó críticas en el tedeum al gobierno de Bachelet. La situación de Moya cambió con la llegada de Piñera, ya que fue contratado por el Gobierno.
Moya -quien dijo esa vez que “no ha habido leyes urgentes para las necesidades reales de la gente”- fue candidato a concejal de Pudahuel en 2012 por RN. Y varios en la centroizquierda dicen que es cercano al exalcalde Luis Plaza. En la actualidad, aparece desde el 18 de junio contratado a honorarios como “experto” en el Ministerio Secretaría General de la Presidencia (Segpres) -que lidera Gonzalo Blumel (Evópoli)- con una remuneración de $1.032.355 y con una “calificación profesional o formación” de “Licencia de Enseñanza Media”. Todo esto, de acuerdo al registro que aparece en el portal de Transparencia de la Segpres.
Moya no fue el único que fue contratado por el gobierno. El entonces director de comunicaciones del Concilio de Iglesias Evangélicas, Cristián Nieto, actualmente se encuentra trabajando a honorarios, desde el 16 de abril, en el Instituto de Previsión Social (IPS), organismo dependiente del Ministerio del Trabajo y Previsión Social, que encabeza Nicolás Monckeberg (RN). En el pasado, fue candidato a diputado de RN por Cerro Navia en 1997 y asesoró a Augusto Pinochet Hiriart en el período en que el padre de este último se encontraba detenido en Londres.
Según la información del portal de Transparencia de esa unidad, Nieto, con profesión de periodista, ejerce la función de “asesorar al subdirector de Servicios al Cliente y a las distintas áreas de la Subdirección en el proceso de mejora continua de la gestión en distintos ámbitos con un foco en el perfeccionamiento de la atención ciudadana”. Esto, con una remuneración mensual de $3.333.333.
