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Investigan móvil delictual en asesinato de cónsul de Chile en Siria

El primer secretario Héctor Faúndez Parra había llegado en noviembre pasado a Damasco. Una de las razones que motivaron su traslado fue que era uno de los pocos funcionarios de carrera capaz de hablar árabe. Separado hace 13 años, vivía solo en uno de los barrios más acomodados de la capital siria, por lo que se especula con que habría sido víctima de un intento de robo.


Cuando en noviembre pasado llegó Héctor Faúndez a Damasco para asumir como cónsul de Chile en Siria, jamás pensó que sería su última destinación y que moriría trágicamente durante un hecho policial que afectó a su departamento la noche del domingo y que, según fuentes diplomáticas, se trataría de un robo.



En un escueto comunicado, la Cancillería comunicó que «el Sr. Faúndez fue encontrado muerto en su hogar esta mañana (del lunes) como consecuencia de un acto delictual", y que las autoridades sirias se comprometieron a investigar «acuciosamente» el crimen, con el objetivo de determinar con exactitud las circunstancias.



Sin embargo, al menos hasta la tarde de lunes, en la Embajada de Siria en Santiago no tenían antecedentes sobre el incidente.



De acuerdo a las fuentes consultadas por El Mostrador.cl, el cónsul chileno -con el rango diplomático de primer secretario- vivía solo en un sector acomodado de la capital de Siria, y lo más probable es que el móvil haya sido un robo, considerando que no gozaba de un resguardo especial.



Con excepción de los embajadores, los diplomáticos destinados en el extranjero no tienen derecho a casa, por lo que generalmente tienen que arrendar un lugar donde los destinan -con el viático que se le asigna-, y tampoco cuentan con un resguardo policial.



Anteriormente, existía un manual que se llamaban Dipruco (Dirección de Protección y Control) para quienes estaban en el Servicio Exterior, pero eso se terminó hace 10 años, indicaron fuentes diplomáticas.



Funcionarios diplomáticos señalaron a El Mostrador.cl que luego de lo sucedido en Siria, Chile debería evaluar si mantiene su legación en ese lugar, considerando los últimos incidentes registrados en Damasco.



En febrero de 2006, la sede de la embajada fuera atacada y quemada durante las protestas por la publicación de unas caricaturas de Mahona en un medio danés.



En esa oportunidad, los manifestantes incendiaron la legación danesa y, de paso, dañaron gravemente la estructura del edificio donde también funcionaban las oficinas diplomáticas de Suecia y Chile.



«Muy buen amigo»



Faúndez, tenía 47 años, era economista e ingresó a la Academia Diplomática cuando tenía 20 años. Se había casado con una ciudadana alemana a quien conoció en su anterior destilación, pero hace 13 años se había separada de ella, con quien tampoco tuvo hijos.



Sus otras destinaciones habían sido Alemania, Honduras, Nicaragua, además de haber estado en la Dirección de Medio Oriente, Planificación Consular, Europa y África y Medio Oriente.



En materia profesional, destacaba por ser uno de los pocos diplomáticos que hablaba árabe -además de perfecto inglés, alemán y francés-, por lo que fue una de las razones que determinaron su traslado a Siria.



Quienes conocieron al "gordo", como lo llamaban sus compañeros de curso en la Academia Diplomática, no podían creer lo sucedido y se encontraban consternados por el trágico hecho.



Sus cercanos aseguran que "era un hombre tremendamente vital, lleno de vida, muy jovial, optimista, divertido, con mucho sentido del humor, era un muy buen amigo".



Asimismo, aseguran que "a Héctor Faúndez todos los querían en la Cancillería, porque siempre trataba de ayudar a las personas y su alegría era lo que más destacaba en él".



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