Este jueves en el Consejo de presidentes de clubes seguirá la pelea que hace varios meses mantienen los equipos grandes con el presidente de la ANFP. El punto es cómo repartirse los US$35 millones que dejó el CDF, un negocio en alza. Conozca las armas de cada bando en un estadio sin pasto pero más violento: el mercado.
El sorteo para Sudáfrica 2010 fue favorable para Chile en el papel. Pero frente a las cámaras Harold Mayne- Nicolls, no varió un milímetro su expresión calma y el tono mesurado de sus declaraciones. Lo único que por estos días hace perder la compostura al presidente de la ANFP es el conflicto con Blanco y Negro, Azul-Azul, y Cruzados SADP.
Las sociedades que manejan los tres equipos con más hinchas en el país, creen que este es precisamente un argumento suficiente para que les toque una porción más grande de los US$35 millones que en 2009 generó como excedentes el Canal del Fútbol (CDF)
Mientras, Mayne-Nicholls propone un reparto igualitario para todos los clubes, con la intención de que ese dinero llegue a los equipos más chicos y sirva para “profesionalizar la actividad”. El receso de la Selección hizo que esta pelea quedara al descubierto y subiera de tono. Pero viene desde fines de agosto cuando en el consejo de presidentes de clubes, Harold dijo: “cuando hay valores no hay dinero ni moral”. Periodista de la Universidad Católica, con esa “cuña” el presidente de la ANFP logró enfurecer a los clubes, que respondieron con una carta al resto de los clubes. La misiva estaba centrada en el maltrato y las descalificaciones y por supuesto en el “reparto de flujos” provenientes del CDF.
En la carta, firmada por Jorge O’Ryan presidente de Universidad Católica, Gabriel Ruiz Tagle de Colo-Colo y Federico Valdés de Universidad de Chile, los clubes detallaban su propuesta, que básicamente propone que los equipos de primera A se queden con el 70% de los excedentes ( US$ 24,5millones) y el 30% ( US$10,1 millones) para los clubes de Primera B.
Claro que la propuesta descrita en la carta es “transitoria” y de ser aceptada sería sólo hasta el 31 de diciembre de 2010.
Porque esta pelea recién comienza, sobre todo teniendo en cuenta el crecimiento explosivo del CDF y su exitoso modelo de negocios, que ya estudian exportar a Argentina. Hasta Sebastián Piñera, a través de Juan Luis Rivera, su ex brazo derecho en Bancard, hizo una oferta para comprar un porcentaje. Pero cuando escucharon el precio se acabaron las negociaciones. El canal vale más del doble que Chilevisión, el que Piñera compró en US$11 millones.
Al contrario, fue el CDF quién golpeó al canal del candidato cuando se llevó a Felipe Bianchi su rostro más fuerte en el área deportiva, tanto que CHV ha estado negociando con el periodista para que al menos siga apareciendo en el bloque del noticiero central.
Por otra parte Claro y Asociados, la consultora “matriz” del CDF, sumó a Javier Contreras ex ejecutivo de Santander Investment.
Los dirigentes de los clubes grandes conocen los cálculos que anuncian para el mediano plazo que un 70% de los ingresos para sus equipos vendrá desde la televisión. Por eso, piensan en el futuro y para articular las negociaciones en bloque ya se han reunido periódicamente Cristian Ahubert, dirigente de la U, con Luis Felipe Gacitúa de la UC y últimamente Álvaro Romero, gerente general interino de Colo-Colo, porque quien llevaba el asunto, Sabino Aguad, ahora trabaja para Azul Azul.
Además los clubes han pedido asesoría al estudio Guerrero, Olivos, Novoa & Errázuriz donde trabaja Arturo Marín Vicuña, uno de los más experimentados en sociedades anónimas deportivas. Este ayudó a diseñar el rescate de Colo-Colo y hoy figura en Azul Azul.
Paralelamente Jorge Claro, dueño del 20% del CDF (el resto pertenece a un grupo de privados y en forma mayoritaria a la ANFP) se ha mantenido como espectador públicamente neutral sobre este asunto, pero un cercano a las negociaciones asegura que “Jorge obviamente no puede aparecer apoyando a los clubes, pero está de acuerdo con lo sustancial que ellos plantean. Ahora Harold tiene de su lado a la FIFA y si logra que intervenga entonces el conflicto podría escalar mucho más allá”.
En efecto, Jorge Claro, reconocido por su ecuanimidad, fue presidente del Club Deportivo Universidad Católica y Harold Mayne-Nicholls también estuvo vinculado a la dirigencia cruzada. Pero sobre todo es el chileno con más llegada en la FIFA, donde trabajó desde 1993. En el mundial de Alemania 2006 estuvo a cargo de la coordinación en Münich, una de las sedes del campeonato.
En el último consejo de presidentes el ambiente no estuvo amable para Mayne- Nicholls, pues a los clubes grandes se sumó la oposición de Santiago Morning, el equipo que preside Miguel Nasur. Uno de los comentarios que más lo irritó fue el de que “la ANFP ni hoy ni ayer ni mañana se puede quedar con el dinero de los clubes”.
Por eso, el próximo Consejo, programado para este jueves, puede marcar un punto de inflexión. Antes de subirse al avión que lo llevó a Sudáfrica Mayne-Nicholls deslizó la posibilidad de renunciar. “Dejé de lado un cargo en la FIFA, pero no para este tipo de cosas, no queremos volver atrás a cómo estaba el fútbol cuando llegamos», dijo.
