“Hay llamados telefónicos, que según la información que yo tengo, conectan el teléfono de Mohammed Saif Ur Rehman Khan con personas que pertenecieron al grupo Lautaro, que también estuvo participando en procesos de bombas», aseguró el ministro del Interior.
El ministro del Interior, Rodrigo Hinzpeter, reparó en la serie de hechos relacionados entre el Caso Bombas y la detención del joven paquistaní en la embajada de Estados Unidos en Chile.
Si bien el secretario de Estado desmintió que hubiese persecución en contra de Mohammed Saif Ur Rehman Khan, aseguró que el ciudadano extranjero “no ha sido capaz durante todo este tiempo, ni ha tenido la voluntad, a mi juicio, de dar una explicación aunque sea hipotética de cómo pudo haber llegado el explosivo a sus ropas».
En entrevista con radio ADN, el ministro hizo hincapié en que desde el computador del joven paquistaní “aparecieron fotos en las que él aparece recibiendo una suerte de instrucción militar en algún lugar de geografía similar a lo que podría ser Pakistán”.
Como también, dijo, “hay llamados telefónicos, que según la información que yo tengo, conectan su teléfono con personas que pertenecieron al grupo Lautaro, que también estuvo participando en procesos de bombas«.
Haciendo el nexo entre ambos casos, Hinzpeter enfatizó: «Si estos problemas no se toman en serio, crecen en una dimensión que después cuesta resolverlos. El tema de este incipiente terrorismo, para llamarlo con todas sus letras, porque el que pone bombas con objeto de alarmar a la ciudadanía es la prototípica figura del terrorista».
«Este incipiente y criollo terrorismo nosotros tenemos que controlarlo ahora, que está chico, que afortunadamente todavía no hay ninguna persona que tengamos que lamentar una pérdida de vida y no cuando ya sea una cuestión más organizada, con más recursos y mayor implicación en la sociedad», concluyó.
