El dirigente, que corre con la ventaja por estos días de cara a las elecciones de la ANFP, estuvo en 2001 al frente de una sede de la Universidad Internacional SEK en España, donde, asegura un artículo de la época, fue el artífice de numerosos despidos injustificados. «La criba empezó cuando planteamos la necesidad de convocar elecciones sindicales, la empresa presentó una candidatura que perdió y comenzó la cacería», afirmó uno de los afectados.
El presidente de Unión Española y candidato a desbancar a Harold Mayne Nicholls de la ANFP, Jorge Segovia, habría enfrentado hace nueve años serias acusaciones laborales cuando estaba al frente de la sede de la Universidad Internacional SEK en España.
Así lo reveló este lunes el portal Emol, que dio a conocer una nota publicada en 2001 por el diario español El Mundo y donde el dirigente futbolístico, que en el medio local destaca por su actitud reservada y bajo perfil, aparece como el responsable de varios despidos injustificados y de actitudes de hostigamiento hacia los funcionarios de la sede de la casa de estudios.
El artículo escrito por el periodista Pedro Simon señala que «tres años después de que la Institución Educativa SEK instalara su sucursal en España, al imperio chileno de la enseñanza (17.000 alumnos en 11 países de todo el mundo) le han crecido los enanos pidiendo democracia institucional y la empresa, con su director Jorge Segovia al frente, ha tirado de guadaña: 22 despidos (cuatro de ellos del comité de empresa, otro del comité de huelga). Cinco sentencias en contra. Seis actas de infracción de la Inspección de Trabajo… Y subiendo», señala la nota.
También reproduce el testimonio del astrofísico Joaquín Trapero, quien fue expulsado, quien asegura que «la criba empezó cuando planteamos la necesidad de convocar elecciones sindicales, la empresa presentó una candidatura que perdió y comenzó la cacería».
Respecto a Segovia, sostiene: «el hijo, Jorge Segovia Bonet, empresario español de relumbrón en América Latina y actual director del centro, se enfrentó a su propio padre, Felipe Segovia Olmo, presidente de la Institución Educativa SEK y propietario de la Universidad Camilo José Cela. A bocados anduvieron, con querellas criminales padre e hijo de por medio. Y ante los tribunales planteó la inhabilitación de su progenitor por problemas mentales. Segovia junior engordó el negocio en el Chile de los años 80. Sus formas y su salto a España ya están levantando voces de queja».
El reportaje responsabiliza al empresario hispano de estar detrás de actitudes de hostigamiento en contra de los funcionarios de la universidad, las que se presentaban incluso en los cuestionarios que debían responder los profesores al momento de postular a sus puestos.
«¿Cree que el matrimonio está anticuado y debería abolirse? ¿De niño, fue alguna vez descarado con sus padres? ¿Ha hecho alguna vez trampas en el juego? ¿Se lava siempre las manos antes de comer?¿Es (o era) su madre una buena mujer?», eran, según la crónica de Simon, algunas de las preguntas.
El aludido se defendió de estas acusaciones años después, en una entrevista que publicó El Mercurio el año pasado y en la que el dirigente que por estos días corre con la ventaja de cara a las elecciones en la ANFP sostiene que las acusaciones en su contra vertidas en El Mundo fueron sacadas de todo contexto.
«Estuvo todo sacado de contexto, no hubo ninguna guerra con mi familia. Demandé al diario. La información fue completamente falsa. Se retractaron», sostuvo.
Pero Emol habló recientemente con Pedro Simon, quien descartó que haya existido tal retractación y menos que su medio haya enfrentado una denuncia por parte del empresario chileno. «No tuve nunca que ir a declarar, eso es falso. A mi nadie del periódico me dijo que había alguna querella. Yo escribí el artículo por lo tanto tendría que haber sabido», dijo.
