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Piñera anuncia potente fondo de US$ 4 mil millones para educación y despierta sospechas por «letra chica»

Alejandra Carmona López
Por : Alejandra Carmona López Co-autora del libro “El negocio del agua. Cómo Chile se convirtió en tierra seca”. Docente de la Escuela de Periodismo de la Universidad de Chile
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Las principales quejas apuntan a la poca claridad en el tema del lucro, falta de respuesta a las demandas de secundarios y una explicación más clara respecto a detalles y plazos. Los estudiantes seguirán movilizados.


Flanqueado por el ministro de Educación Joaquín Lavín, el Presidente Sebastián Piñera dio a conocer anoche y en cadena nacional el «Gran Acuerdo Nacional por la Educación» (GANE), que tuvo como base el anuncio de un fondo de US$ 4 mil millones (fondo para la Educación, FE), que complemente los recursos del presupuesto fiscal y “se constituya con recursos del Tesoro Público, del Fondo de Estabilización Económico y Social, de los excedentes del cobre y otros que se convengan en el contexto del Gran Acuerdo Nacional por la Educación”, señaló Piñera, que a pesar de poner esta importante cifra sobre la mesa, levantó críticas porque dejó abiertos puntos importantes sobre el lucro y, además, otros temas fueron leídos como incompletos.

Uno de los anuncios tiene relación con mejorar el acceso y calidad del financiamiento a los estudiantes. Para esto la propuesta fue aumentar de 70 a 120 mil las becas para la educación técnico-profesional, también garantizar al 40% de alumnos más vulnerable y “con mérito académico, una beca para acceder a la institución de Educación Superior acreditada que ellos elijan”. En este mismo punto también se incluyó uno de los aspectos más criticados del financiamiento a la educación terciaria, que incluso fue reprochado en un informe del Banco Mundial: la tasa de interés del Crédito con Aval del Estado. Piñera propuso reducir esta tasa a cifras cercanas a un 4%. Pero sumó cuatro palabras: en un año normal.

“El mismo agregó mucha letra chica al discurso. No quedó para nada claro qué significa que se va a disminuir el interés del crédito con aval en un año normal, tampoco queda claro qué quiere decir cuando anuncia una clasificación y menciona a las universidades privadas no tradicionales”, opina Jaime Retamal, Jefe de Carreras del Departamento de Educación de la Usach, quien señala que con este anuncio, Piñera demuestra ser el mejor alumno y un sacerdote y devoto de la concepción neoliberal aplicado a la educación superior.

[cita]“El financiamiento estatal a las universidades hará las diferenciaciones que corresponden entre los distintos tipos de instituciones”, sostuvo Piñera. Este punto fue uno de los que sumó más críticas.[/cita]

Sobre el financiamiento, Piñera también dijo que se convocará a un grupo de trabajo para proponer un nuevo sistema que reemplace al actual Crédito con Aval del Estado, se rediseñará el Fondo de Crédito Solidario y se reprogramará las deudas de los 110 mil deudores morosos.

En cuanto a esta inversión, Camilo Ballesteros, presidente de la Feusach, reconoce que el anuncio “abre puertas”, pero también señala que “la inyección de recursos puede parecer mucha, pero no hay que olvidar que es para todo el sistema. Si se va a invertir en 20 años pierde mucha potencia. Es necesario conocer detalles y plazos”, agrega, en el marco de una propuesta que también incluyó guiños para los secundarios movilizados. “Adicionalmente, he dispuesto que el Ministro de Educación, dialogando con todos los actores, fortalezca los liceos técnicos profesionales y la educación pública escolar, para que todos nos sintamos orgullosos de ella, a través de nuevas opciones de administración de los colegios municipales”, señaló. Sin embargo, los estudiantes no se demoraron en darle un portazo y la Asamblea de Estudiantes Secundarios (ACES), hizo un llamado a continuar con las movilizaciones al no escuchar “respuestas a sus demandas”.

Respecto a la Educación Superior, el Mandatario también dijo que se establecerá un nuevo trato con las universidades del Estado, “mediante un estatuto que modernice el gobierno universitario, desburocratice y flexibilice su gestión, permita el endeudamiento a mayores plazos, cree un fondo basal para su revitalización, y refleje de esta forma el sólido compromiso del Estado con las universidades estatales y de éstas con el Estado y la sociedad”.

El lucro

Ha sido uno de los temas que más ha molestado al ministro Lavín en las últimas semanas, debido a su pasada vinculación con la Universidad del Desarrollo y al insistente reclamo de todos los actores involucrados en las demandas estudiantiles. De hecho, la Contraloría estableció un plazo de 10 días a Lavín para que transparente su relación con la UDD. Sin embargo, Piñera no fue, de acuerdo a sus detractores, lo suficientemente claro en este punto en su discurso.

En el anuncio, Piñera dijo que se definirá una nueva institucionalidad para el sistema universitario, que diferencie universidades estatales, tradicionales no estatales y privadas no tradicionales. Además, para asegurar la “transparencia del sistema” se abrirá un debate para distinguir aquellas con fines de lucro y que de acordarse su existencia, éstas pagarán impuestos por sus utilidades, “los que destinaremos íntegramente al financiamiento de becas y préstamos para los alumnos más vulnerables”, dijo.

“El financiamiento estatal a las universidades hará las diferenciaciones que corresponden entre los distintos tipos de instituciones”, agregó. Este punto fue uno de los que sumó más críticas.

El presidente de la Comisión de Educación del Senado, Jaime Quintana, aseguró que el discurso estuvo lleno de siglas nuevas, “pero faltaron las principales como la Confech y Cruch, quienes son los representantes del gran movimiento por una educación pública, gratuita y de calidad que exige la ciudadanía”.

Ballesteros, de la Feusach, dijo que “es cuestionable que se abran a la posibilidad de naturalizar el lucro que ahora es ilegal y nos parece incorrecto que se esté tratando de borrar con el codo que hay funcionarios públicos que han lucrado”. En la misma línea, fueron las palabras de la presidenta de la Fech, Camila Vallejo, que en declaraciones a Radio Cooperativa calificó como una “gran decepción” la propuesta de Lavín y señaló que con respecto al lucro “hoy día no se está haciendo valer la ley: están vulnerando la ley que ellos mismos se han dado, vulnerando el Estado de Derecho y se va a permitir lucrar en las universidades. Eso no es más que un retroceso a lo que nosotros hemos venido planteando», señaló.

Quien también se refirió al discurso fue el director del Centro de Políticas Comparadas de la Educación de la UDP, Jose Joaquín Brunner, quien dijo que «el Presidente ofrece un marco muy general en su anuncio, pero no queda claro cómo se van a concretar, algunos supongo serán proyectos de ley, pero no dice los plazos, ni con qué interlocutores va a conversar para poder llegar al acuerdo que está buscando”.

Quizás uno de los gallitos más claros ganados por la contraparte de Lavín es la Superintendencia de Educación Superior, un punto que estaba en el petitorio del Consejo de Rectores y que había sido desoído por las autoridades que ofrecían sólo una Subsecretaría. La última conversación sobre este tema, entre rectores y autoridades, ocurrió el sábado en la tarde en el café Tavelli de Vitacura. En ese lugar se reunieron los ministros Joaquín Lavín y Cristián Larroulet y los rectores de la Usach, Juan Manuel Zolezzi y el de la Chile, Víctor Pérez.

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