Convocatoria se calculaba en más de 40 mil personas
El recorrido autorizado por la Intendencia Metropolitana dispuso que la nutrida columna de manifestantes avance por la Alameda hasta Mac Iver, continúe hacia el norte hasta el Parque Forestal para posteriormente concluir en las inmediaciones de la Estación Mapocho, donde se montó un escenario para un acto de clausura. Justamente en este sector, grupos aislados de encapuchados comenzaron a protagonizar desórdenes y se enfrentaban con Carabineros. [En actualización]
Varios miles de estudiantes respondieron este jueves a la convocatoria de una nueva marcha organizada por la Confederación de Estudiantes de Chile (Confech) y las organizaciones de secundarios, para mantener vivas sus demandas como el fin al lucro y una educación pública de calidad, temas que según los dirigentes de las citadas organizaciones no están garantizados en los proyectos que envió al Ejecutivo para su discusión al Parlamento.
Los jóvenes comenzaron a reunirse temprano en el sector de Plaza Italia y comenzaron a avanzar pasadas las 11:30 horas, por la Alameda Bernardo O’Higgins hasta la calle Mac Iver y luego hacia el norte hasta el Parque Forestal para llegar hasta el sector de la Estación Mapocho, que fue el recorrido autorizado por la Intendencia Metropolitana.
Si bien la manifestación se desarrolló en completa normalidad y de forma pacífica, a pocas cuadras del escenario montado para la realización de un acto central, más de un centenar de jóvenes encapuchados comenzaron a enfrentarse con Fuerzas Especiales de Carabineros, lanzándoles bombas molotov, piedras y sacando barreras de contención y las señaléticas de todo el sector.
En una conferencia de prensa antes de iniciarse el recorrido, al que se sumaron representantes del Colegio de Profesores, de asociaciones de apoderados y de otros movimientos sociales, el presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad Católica (FEUC), Diego Vela, se quejó que el Ejecutivo no ha escuchado al movimiento estudiantil y ha enviado al Congreso proyectos de ley que se oponen a sus demandas históricas.
Vela dijo que prueba de ello es, por ejemplo, que sigue impulsando «una subvención a la clase media que fortalece el financiamiento compartido, una de las principales causales de segregación en educación» y que también «vemos que se habla de que se quiere avanzar en terminar con el negociado en educación, pero se permite que siga avanzando una Superintendencia de Educación Superior que legitima el lucro en vez de terminarlo».
Por lo anterior, justificó que sigan realizándose manifestaciones como la de hoy. «Nosotros entendemos que la única manera como podemos construir un país distinto, un país inclusivo y la construcción de un país que realmente nos trate a todos por igual, es que si seguimos organizados y seguimos movilizándonos en las calles, es que podemos cambiar esta realidad», dijo.
