Trastienda de la tensa noche del domingo en la derecha
Sucedió en el patio trasero de la sede gremialista en momentos en que la directiva de RN acudía a saludar al ganador, Pablo Longueira. “Lavín quería que Longueira, Allamand, y Golborne salieran al balcón tras las primarias”, explicó hoy Nicolás Monckeberg, coordinador político de la campaña de Allamand. El ex titular de Defensa se habría molestado por la puesta en escena diseñada por Lavín.
El café que compartieron Andrés Allamand y Pablo Longueira, junto a sus cónyuges, en el Tavelli de Vitacura, organizado para mostrar ante la prensa el buen ánimo y la camadería que existe entre ambos después de las primarias, se contrasta con lo ocurrido durante la noche del domingo en el patio trasero de la sede gremialista en momentos en que la directiva de RN acudía a saludar al ganador.
Según La Tercera, el hecho ocurrió cerca de las 21:30 horas. En el lugar se encontraban miembros de la directiva y el comando UDI —entre ellos el alcalde Francisco de la Maza, Joaquín Lavín y Felipe Salaberry—, quienes esperaban a Allamand con el fin de conducirlo hasta la sala de prensa.
La idea básicamente consistía en que Longueira hablara a sus partidarios desde el balcón de la casona y luego se reuniría con el ex candidato de RN y las directivas para conceder una conferencia de prensa en conjunto. Diseño que se había consensuado entre Joaquín Lavín y el diputado Nicolás Monckeberg.
Sin embargo, a último minuto, el esquema fue alterado por Allamand, quien optó por saludar en privado a Longueira y marcharse del lugar.
Una vez en la sede de la UDI, Allamand —visiblemente afectado por la puesta en escena— se descargó con Lavín a quien le dijo: «¡No tienes límites, me quieres humillar!». Dicen que Monckeberg intentó retener al ex ministro, pero éste marchó sin vuelta atrás.
En entrevista con Radio Agricultura, el diputado RN señaló que «Lavín quería que Longueira, Allamand, y Golborne salieran al balcón tras las primarias» y aseguró que «gran parte de eso es una novela inventada por alguien que dio un mal dato».
De acuerdo a esta versión, una vez que estuvo claro el ganador, llamó a Lavín y le dijo que calculara que en 45 minutos más estarían en la sede de la UDI. «Allá había tal cantidad de gente, que el mismo Joaquín me llama y me dice que entráramos por Lota, que es una entrada lateral en donde no había periodistas ni gráficos, pero sí había gente que fue muy amable”.
“Cuando entramos, Joaquín Lavín nos dijo que saliéramos al balcón todos los candidatos de la Alianza, es decir, junto a Laurence Golborne, pero no pudimos hacerlo porque no habían periodistas, así que se sacaron las fotos del saludo de Allamand con Longueira con celulares”, detalló.
No obstante, reconoció que la idea de aparecer junto a Golborne incomodó a Allamand: «Como fue a última hora, se optó por lo tradicional que fue saludarlo. Además, a última hora Joaquín Lavín dice que salieran los tres al balcón, y era algo que no se había analizado, y además Laurence Golborne hace 10 minutos había criticado por Twitter a Andrés Allamand. Y después supe que Laurence Golborne ni siquiera estaba ahí».
«Cuando no pudimos registrar el saludo en la noche, yo mismo quedé con la misión de gestar el saludo en el café al otro día. El espíritu unitario de los dos era completo. Pero eso de que hubo roces es mentira. Hablaron, Andrés Allamand le dijo sinceramente que contaba con toda su disposición, Pablo Longueira dijo que, desde el punto de vista de candidato, iba a garantizar la máxima equidad para las parlamentarias», acotó Monckeberg.
